Sic Sac, por: M.A. Elda Clemente Reyes
Las luchas sociales a lo largo de la historia son el precedente de la participación ciudadana. En los últimos años se desarrolló a partir de la contribución de los regímenes por consolidarla y crear las condiciones necesarias para su óptima influencia.
El término se conceptualiza como la intervención organizada del pueblo en los asuntos gubernamentales y en la administración pública.
Para que sea efectiva en un régimen democrático según la autora Azucena Serrano Rodríguez, “el Estado debe garantizar el respeto de las garantías individuales, los canales institucionales y marcos jurídicos, la información y la confianza por parte de los ciudadanos hacia las instituciones democráticas.
Velar por el bienestar general ha sido el Talón de Aquiles para los responsables de ejecutar las políticas públicas dirigidas a la población.
Cuando la desconfianza se apodera de la ciudadanía hacia las instituciones, es porque no están realizando sus funciones correctamente o porque se tiene la percepción que están trabajando para favorecer un sector específico.
Por ello, evitarán involucrarse con el gobierno o su colaboración será escasa. Para impulsar su aportación, debe asegurarse primero, la credibilidad de las autoridades y de los servidores públicos.
Lo anterior, reafirma el papel principal de las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC), como estructuras que agrupan a personas que comparten un mismo objetivo y logran beneficios a favor de la comunidad, que muchas veces, no encuentran respuesta oportuna a sus demandas, convirtiéndolas en la única opción capaz de ofrecer soluciones inmediatas.
Algunos partidos políticos las utilizan como un puente de acercamiento con los electores, que cada vez, sufren más desencantos.
A lo largo de las dos últimas décadas se han creado mecanismos, leyes e instrumentos jurídicos que favorecen y regulan su contribución en distintos ámbitos. En Campeche existen más de 300 asociaciones constituidas legalmente y no constituidas, que realizan algún tipo de activismo.
Las OSC hoy más que nunca están presentes en el escenario social, económico y político. Firmes en su lucha por superar sus debilidades, conservando las fortalezas de cada una.
Entre sus principales retos se encuentran la inclusión, ciudadanización y concientización, que les permita convertirse en inspiración para motivar a más individuos a participar pasando del individualismo a un sano interés colectivo, donde las voces de los líderes proactivos sean escuchadas e incidan en la toma de decisiones. Ser contrapesos necesarios para evitar nuevas formas de autoritarismo y corporativismo.
El presente y futuro de estas agrupaciones se torna incierto, dependerá del afianzamiento de un proyecto global que marque la pauta, hacia una vinculación real y positiva, con el fin de unir esfuerzos y voluntades, más allá de fines personales o partidistas.
Las OSC nunca se situaron en una lógica del llamado clientelismo sino como instrumentos que permitieran combatir las causas de la pobreza y generar opciones para mejorar las condiciones de vida, al lado de movimientos populares y sociales.
DANIEL LEÓN, CUMPLE COMPROMISO
Cumpliendo uno de sus compromisos al pueblo champotonero y como resultado de su gestión, el alcalde Daniel Martin León Cruz, presidió en la comunidad Carlos Salinas de Gortari, la reunión con productores a fin de crear un centro de acopio de leche que beneficiará a más de 400 personas de esa región, acompañado del coordinador del desarrollo de la red de acopio de Liconsa, Elias Monreal Ávila, y el gerente de Liconsa en el Estado, Gerardo Mixcoatl.
Cabe mencionar, que la leche que se capta en Campeche es llevada a la Ciudad de México, donde se procesa para convertirla en polvo, y posteriormente, es enviada en sobres a cada una de las entidades del país.
