MEMORIAS VII
Por Marco Antonio Cortez Navarrete
Ya con leyes y reglamentos y un sistema administrativo y financiero sólidos, la flamante Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) inició, lo que para un servidor sería su despegue académico.
Hablo de la administración que encabezó el rector Raúl Humberto Godoy Montañez quien estuvo al frente de la institución del 1 de enero de 1999 al 31 de diciembre de 2006.
Antes de hablar de la espiral ascendente de la academia, quiero recordar que para el proceso de elección de rector en aquel entonces se registraron varios aspirantes, hecho inédito en la máxima casa de estudios. Entre estos hubo directivos de la administración central, directores y ex directores y académicos.
Además de nuevos programas educativos de licenciatura y posgrado, la institución comenzó un proceso de transformación al agrupar a las facultades en cinco grandes campus por áreas del conocimiento: Ciencias Biológicas y Agropecuarias, Ciencias Exactas e Ingenierías, Ciencias de la Salud, Ciencias Sociales, Económico-administrativas y Humanidades y de Arquitectura, Hábitat, Arte y Diseño.
Recuerdo bien que una de las principales características de estos campus era tener como eje integrador grandes bibliotecas generando un proceso transversal del conocimientos entre académicos y estudiantes de los diferentes programas y con esto dar paso a la creación de más e innovadores programas de licenciatura, posgrado y líneas de investigación.
Asimismo, en el año dos mil se inauguró la Unidad Multidisciplinaria de la UADY en Tizimín con la finalidad de llevar la educación superior jóvenes del oriente del estado y también del estado de Quintana Roo.
En mi memoria está la asistencia de Ernesto Zedillo Ponce de León, entonces presidente de la República; Víctor Cervera Pacheco, gobernador constitucional; ex rectores, funcionarios públicos y cientos de habitantes y jóvenes integrantes de aquella histórica primera generación de estudiantes de los programas educativos ofertados.
Por otro lado, tuve el honor y privilegio de atestiguar la colocación de la primera piedra de lo que hoy es el campus de ciencias sociales-económico-administrativas y humanidades. Esa piedra se convirtió en la hoy Facultad de Ciencias Antropológicas.
También asistí como comunicador a la colocación de la primera piedra que dio paso a la actual Facultad de Matemáticas sumándose a la Facultad de Ingeniería y años después se concretó la construcción de la Facultad de Ingeniería Química, plantes que dieron origen al campus de ciencias exactas e ingenierías.
La tarea no fue sencilla pero la universidad siguió su proceso de cambio que concluyó apenas hace unos meses cuando la Facultad de Contaduría y Administración se trasladó finalmente al campus de ciencias sociales. Una titánica labor que ocupó más de dos décadas.
Este desarrollo emergió durante la administración de Godoy Montañez, incluso pronosticando que el edificio central quedaría como un centro cultural —cosa ya sucedió— formando parte de un corredor turístico cultural en el centro histórico de la capital yucateca.
El doctor Godoy fue también director de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, plantel que recibió, y creo continúa recibiendo, apoyo de prestigiadas universidades británicas y gobierno inglés. Por cierto al doctor Godoy lo conocí y entrevisté por vez primera cuando fue jefe de la unidad de investigación y posgrado de la FMVZ de la UADY.
Para finalizar quiero destacar que en la administración del doctor Godoy se diseñó una estructura central donde la columna vertebral es el Desarrollo Académico, Dirección General de la que han salido tres rectores, incluyendo al actual, Carlos Estrada Pinto, dejando en claro que para la universidad su razón esencial de ser es la formación de profesionales en programas de calidad, algo de lo que, si Dios quiere, escribiré en breve.
PD. Después de su gestión como rector el doctor Godoy cumplió responsabilidades en el sector público, tal y como pasó con sus antecesores al frente de la universidad, Mimenza y Pasos, no obstante, estos son harina de otro costal.
Hasta la próxima y por favor: Sean Felices