Europa central y oriental están siendo gravemente afectadas por las lluvias más intensas en décadas, que han dejado al menos cuatro personas muertas y cientos de desplazados en varios países de la región. El fenómeno, causado por la Tormenta Boris, ha inundado ciudades y provocado la evacuación masiva de residentes en áreas de Rumania, Polonia, República Checa y otros países.
En Rumania, las autoridades confirmaron la muerte de cuatro personas, encontradas en la región de Galati, al sureste del país. Las lluvias torrenciales provocaron inundaciones en al menos 19 localidades, obligando a los equipos de rescate a intervenir en numerosas operaciones para salvar a personas atrapadas.
La tormenta también ha causado estragos en Polonia, donde las crecidas de los ríos han llevado a la evacuación de varios municipios, como Glucholazy, donde el nivel del río Biala subió dos metros en una sola noche.
En la República Checa, se han emitido órdenes de evacuación en algunas zonas, mientras que en Austria y Alemania las autoridades también se preparan para posibles desbordamientos de ríos y nuevas evacuaciones.
El ministro del Interior de Polonia, Tomasz Siemoniak, señaló que se están centrando en “las posibles amenazas en las próximas horas”, mientras que las alertas meteorológicas continúan vigentes para buena parte de Europa central.
Según los meteorólogos, se espera que las lluvias persistan durante los próximos días, complicando aún más la situación en las regiones afectadas.
Los expertos atribuyen estos fenómenos meteorológicos extremos al cambio climático, alertando que eventos como la Tormenta Boris podrían volverse más comunes en el futuro.