A partir de mayo de 2024, España implementará una nueva política migratoria que permitirá la legalización de unos 300.000 migrantes indocumentados al año hasta 2027. La iniciativa tiene como objetivo expandir la fuerza laboral española, que enfrenta el desafío del envejecimiento de su población, y ofrecer a los migrantes que se encuentran sin la documentación adecuada la posibilidad de obtener permisos de trabajo y residencia.
En una entrevista el miércoles, la ministra de Inclusión, Migraciones y Seguridad Social, Elma Saiz, explicó que España necesita alrededor de 250.000 trabajadores extranjeros registrados anualmente para mantener su estado de bienestar social. Saiz destacó que la política no solo se trata de enriquecer la cultura y respetar los derechos humanos, sino también de prosperidad económica para el país. “Podemos decir que hoy España es un país mejor”, afirmó la ministra en un mensaje a la emisora nacional Radiotelevisión Española.
Esta medida refuerza el enfoque abierto de España hacia la migración, en contraste con otras naciones europeas que han endurecido sus políticas migratorias. El presidente del gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido la migración como una estrategia para contrarrestar la baja tasa de natalidad en el país, un fenómeno que afecta la sostenibilidad del sistema de bienestar. De hecho, en agosto, Sánchez visitó varios países de África Occidental para abordar la migración irregular hacia las Islas Canarias, un punto de entrada clave para quienes buscan llegar a Europa.
Nuevas Facilidades y Protecciones para Migrantes
La política aprobada recientemente por el gobierno de coalición minoritaria de izquierda simplifica los procedimientos administrativos para la obtención de visas de corto y largo plazo, ampliando de tres a doce meses la duración de una visa que anteriormente solo se otorgaba por tres meses. Además, se implementarán protecciones laborales adicionales para los migrantes, quienes a menudo trabajan en sectores mal remunerados, como la recolección de frutas, el cuidado de personas y la entrega de productos, en la economía sumergida del país.
Según datos del Ministerio del Interior, hasta mediados de noviembre de 2023, 54.000 migrantes indocumentados habían llegado a España este año, ya sea por mar o por tierra. Si bien se desconoce el número exacto de migrantes sin documentación en el país, muchos de ellos trabajan en empleos esenciales que los ciudadanos españoles suelen rechazar.
Combatir la Explotación y el Fraude
Saiz también resaltó que esta medida ayudará a combatir las mafias, el fraude y la vulneración de derechos. Muchos migrantes irregulares, debido a su situación, son especialmente vulnerables a la explotación laboral y el abuso, ya que no cuentan con protecciones legales. La legalización y regularización de su estatus permitirá que estos trabajadores accedan a mejores condiciones de trabajo y evitará su explotación en el mercado informal.
La economía española ha sido una de las de mayor crecimiento dentro de la Unión Europea en 2023, en parte gracias a la migración y el repunte en el turismo tras la pandemia. Según cifras oficiales, en 2023 se emitieron 1,3 millones de visas a extranjeros, un indicador del creciente flujo migratorio hacia el país. La nueva política de regularización contribuirá aún más a la estabilidad de la economía española al integrar a estos migrantes al sistema laboral formal, con acceso a derechos y protección social.
En resumen, la decisión de España de regularizar a una gran cantidad de migrantes indocumentados refleja un enfoque integral que no solo responde a las necesidades económicas del país, sino que también aborda las realidades sociales y humanas de los migrantes que viven en situación irregular.
