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La Casa de las Flores 3

David Moreno
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En la pantalla, por: David Moreno.

Vi la primera temporada de La Casa de las Flores, evité la segunda. No veía razón alguna para continuar viendo la neo telenovela creada y producida por Manolo Caro, particularmente cuando en la oferta televisiva hay cualquier cantidad de productos a los que sí vale la pena dedicarle el atesorado e irrepetible tiempo. Ahora, tal vez como resultado del aislamiento y el distanciamiento social, estoy viendo la tercera temporada.

Lo más divertido es que no hace falta ver la segunda entrega para comprender lo que sucede en la tercera. Como toda telenovela que se precie de serlo, el guion está lleno de situaciones repetidas e inverosímiles, de asuntos a los que se les dan cualquier cantidad de vueltas para terminar contando lo mismo, lo previsible, por lo que alguien con un mínimo entrenamiento en el melodrama televisivo nacional puede, casi de manera inmediata, conectarse con los hechos contados en el programa seriado.

La historia sigue narrando acontecimientos ligados a la familia De La Mora. Resulta significativo el hecho de que la matrona de la misma en la primera temporada ya no esté más en el programa. Virginia de la Mora (Verónica Castro, en su regreso a las telenovelas) era un personaje central y completamente fundamental para el desarrollo de la historia. Pero la actriz decidió no regresar al show y su personaje – tal y como ha sucedido en las telenovelas mexicanas cuando un actor o actriz es despedido del serial – muere y por lo tanto eso genera que el peso de la narración recaiga en otros personajes. Pero, el personaje es tan importante que los guionistas encontraron la forma de – otro cliché telenovelero – “resucitarlo”. Lo hicieron creando una narrativa paralela a la contada en el presente de la serie, para narrar los orígenes de los conflictos sentimentales de los de La Mora justo cuando Virginia era un adolescente que resulta embarazada sin saber, obviamente, quien es el padre de la criatura que crece en su vientre. El larguísimo flashback trata de complementar a lo que sucede en el presente pero su inserto es tan forzado que provoca que la historia se convierta en algo repetitivo, particularmente porque una de las hijas de la difunta Virginia vive en el presente una situación similar al quedar embarazada sin estar muy segura de quien es el padre. Todo sigue girando en torno a traiciones, relaciones amorosas y sentimientos de los integrantes de la familia De la Mora y de quienes accidentalmente se han topado en su camino. Al final La Casa de las Flores no deja de ser un melodrama sumamente convencional salpicado algunos tintes de comedia que por muy breves momentos rescatan a la serie del letargo.

Sin embargo en esta nueva entrega (afortunadamente, la última) vale la pena rescatar la incorporación de dos estupendas actrices que interpretan al mismo personaje en los dos tiempos narrativos de la serie: Rebecca Jones y la legendaria y fabulosa Isela Vega. Ambas interpretan a Victoria, la madre de Virginia y la compenetración entre las dos actrices es espectacular y una termina por ser el reflejo de la otra. Y claro, están Cecilia Suárez y Paco y María León. Los tres tienen un estupendo sentido cómico y construyen un bizarro triángulo amoroso que no termina de ser del todo explotado pero que funciona por la química que logran tener los tres actores. Lo mismo sucede con Darío Yazbek Bernal quien parece tener un prometedor futuro en la comedia ligera.

Pero a pesar de lo anterior, La Casa de las Flores se esfuerza tanto en parodiar a la telenovela que termina por convertirse una tan convencional como cualquier otra y quizá ese sea el secreto de su éxito. Está dirigida a un público que ha crecido bajo la influencia de Carla Estrada y que no tenía en los servicios de streaming un producto dirigido y enfocado en el mismo.

Al final la telenovela sigue ocupando un lugar importante en el gusto del público mexicano, un público que tiene al melodrama inserto en el ADN y que no está dispuesto a una reconversión genética del orden audiovisual. Ignoro si Netflix o algún otro servicio de streaming producirá nuevamente una telenovela similar a La Casa de Las Flores, pero dado el éxito de la misma es posible que así sea. Ya veremos que determina un Cronos que ahora parece extender al máximo sus horas para que muchos terminemos viendo un programa solo por – a distancia – convivir.

David Moreno
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