Por: Bernardo Graue Toussaint.
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@bernardo_graue
Creo que mucho le hemos permitido al Presidente López. Mucho, muchísimo.
Y pienso igualmente que este perverso personaje abusa -día con día- de un falso derecho que él se atribuye a sí mismo para insinuar, burlar, insultar, acusar y difamar, a diestra y siniestra.
Que quede claro: TODO TIENE Y DEBE TENER UN LÍMITE. No se puede conducir una sociedad sin reparo en el discurso político.
Resulta verdaderamente irresponsable, por parte del Presidente de la República, que en días pasados haya insultado al cuerpo médico mexicano (a quienes acusó de que, en el periodo neoliberal, se dedicaban a mercantilizar la salud). Hacer estas acusaciones en medio de una crisis sanitaria global que, en México, está teniendo duros efectos y pérdidas de miles de vidas humanas, resulta un despropósito.
La firme respuesta de los médicos mexicanos fue de profunda indignación, como no podía ser de otra manera.
El Presidente López, en una sesión más de su espectáculo mediático (sus absurdas y circenses conferencias de prensa tempraneras) salió a “disculparse”, argumentando que sus palabras fueron mal interpretadas:
(Textual) “No, si lo entendieron así, ofrezco disculpas, pero no fue eso. Hablé de cómo los médicos tienen una vocación humanista. ¡Imagínense! era médico Ernesto “Che” Guevara; también era médico Salvador Allende. Cómo voy a hablar mal de los médicos. A mí me salvaron la vida un grupo de médicos. Es que todo lo están tergiversando. Por eso ahora estoy hablando hasta más despacio que de costumbre. No quiero hablar de corrido, porque me están viendo con microscopio, escudriñan todo lo que hago, no dije eso”.
A ver, a ver…
1.- Luego de que en México ha habido agresiones verbales y físicas contra médicos y enfermeras que están dando lo mejor de sí en esta pandemia, resulta un acto idiota (por decir lo menos) que el Presidente López salga a propinar a los galenos (sean del ámbito público o privado) una paliza verbal desde su atril presidencial.
2.-Ernesto “Che” Guevara fue, efectivamente, médico. También hay que decirle al Presidente López que el “Che” igualmente fue un gatillero que, en nombre de la revolución cubana, no tuvo reparo alguno en arrebatar la vida (por la vía de un buen balazo) a quienes disentían de los postulados de Fidel Castro y de su causa.
3.- El Presidente López, queriendo ahora hacerse la víctima, argumenta que ahora hablara más despacio que de costumbre, porque no quiere hablar de corrido, dado que le están viendo con microscopio. PUES NO, HABRÍA QUE DECIRLE AL PRESIDENTE LÓPEZ QUE LA SOLUCIÓN NO ESTÁ EN HABLAR DESPACIO, SINO EN USAR EL CEREBRO ANTES DE ECHAR A ANDAR LA BOCA.
Ayer me preguntó un amigo mi opinión respecto de este embate presidencial contra los médicos mexicanos. Simplemente respondí: LAS ACCIONES DEL PRESIDENTE LÓPEZ DEMUESTRAN SU ORFANDAD. ¿ASÍ O MÁS CLARO?