La Revista

El silencio de otros

David Moreno
David Moreno
Sígueme en redes sociales:

En la pantalla, por: David Moreno.

La primera secuencia de El Silencio de Otros muestra a una mujer de muy avanzada edad arreglándose el cabello. Vestida de un solemne negro sale de su casa con la andadera que le ayuda a desplazarse. Lleva un ramo de flores en las manos y en algún momento recibe el auxilio de una vecina quien le acompaña a llegar con bien hasta su destino. Llega a la orilla de la carretera y en la barrera de protección de la misma ata el ramo que llevaba entre las manos. Después, con la voz casi apagada, relata que bajo el asfalto, enterrados en una fosa común yacen los restos de su madre. Y relata: “Yo tenía seis años cuando fueron a por mi madre. Gentes del pueblo, todos los de Franco. La encontraron al día siguiente, a orillas de la carretera. No los pudieron meter en el cementerio; el pueblo no nos dejó. Ahí, en esos zarzales, tiraron la ropa. La dejaron desnuda. Lo injusta que es la vida… no la vida, los humanos son muy injustos”.

Se trata de María Martín, una mujer que a sus más de ochenta años no puede olvidar, no quiere olvidar. Ella será una de las protagonistas de “El Silencio de Otros” un poderoso documental sobre la memoria, sobre la lucha para no dejar que el olvido triunfe. Filmado en un período de siete años, el filme narrará la historia de un grupo de sobrevivientes torturados por la dictadura franquista que, apelando al derecho universal, presentará una querella ante la justicia argentina para llevar al banquillo de los acusados a una serie de personajes que ha gozado de la protección del Estado Español porque en 1977, durante los primeros años de la llamada transición española, se firmó la llamada Ley de Amnistía o “Pacto del Olvido” bajo el cual el gobierno ibérico se escudó para no perseguir a quienes cometieron abusos criminales durante la dictadura. La película contará la historia de los integrantes de ese grupo que decidieron luchar contra la falta de memoria histórica oficial. Hará especial un énfasis especial en mostrarles como lo que son: gente común, gente que no mereció ser perseguida con saña por tener ideas diferentes a las del fascismo, madres cuyos hijos les fueron arrebatados al nacer, personas – como María – que lo único que piden es poder abrir las fosas comunes que se encuentran los restos de sus padres o madres para sepultarlos en donde ellos deseen y con los honores familiares que quieran darles.

Almudena Carracedo y Robert Bahar dirigen un poderoso alegato sobre la imperiosa necesidad de revisar de manera constante a la memoria histórica y de la reivindicación que inevitablemente acompaña a tal revisión. Para muchos de nosotros, ajenos a la realidad española, resultará increíble que un país entero haya decidido borrar para siempre hechos dolorosos para reiniciar su vida democrática. El filme explorará esa idea y mostrará las consecuencias de esa imperdonable omisión en las generaciones posteriores a la dictadura que desconocen las consecuencias del Pacto del Olvido y los terribles hechos que se suscitaron bajo la sombra del fascismo franquista. Es a su vez un reivindicación del derecho universal y de la importancia de que los crímenes de Lesa Humanidad deban perseguirse, sin ningún tipo de consideración, en cualquier tiempo y en cualquier tribunal del mundo. Es una película que provoca al espectador para que éste se involucre en una discusión que trasciende las fronteras españolas para instalarse en un área mucho más amplia, una en la que deben interesarse todos aquellos que entienden el papel reinvindicativo que debe tener la justicia sobre todo cuando se ponen sobre el escritorio de los jueces transgresiones relacionadas con la violación de los derechos humanos.

El otro gran logro de los realizadores consiste en producir secuencias sumamente íntimas en las que los protagonistas cuentan su historia para a partir de la misma inferir que estamos ante asuntos que trascienden lo personal para alcanzar los terrenos de lo universal, sin que ello vaya en detrimento de las luchas individuales; en otra palabras al ponerle un rostro, una voz, a cada una de la historias narradas lo que el documental logra es amplificar a esos individuos y convertirlos en las voces y rostros de quienes nunca tuvieron la oportunidad de hacerlo porque fueron borrados por un régimen brutal.

El Silencio de Otros termina por narrar la épica búsqueda de justicia por un grupo de mujeres y hombres comunes que fueron sometidos a las más extraordinarias y terribles situaciones. Es un homenaje a esos cuyos nombres fueron enterrados bajo el cemento o el barro con el objetivo de que pasen a formar parte de las páginas del olvido; y es también un importante documento sobre la importancia que tiene el revisar a los hechos históricos para cambiarlos, transformarlos cuando sea necesario que terminen por contar los acontecimientos en toda su dimensión y con la más absoluta veracidad pues solo de esa forma pueden empujar a las sociedades a no repetir los pasajes más oscuros de su devenir histórico.

El documental está disponible en Netflix.

David Moreno
David Moreno
Sígueme en redes sociales:

No quedes sin leer...

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img

Lo último