Un virus con identidad #peninsular

Pues bien, hoy las cifras bajaron ligeramente. Hubo “solo” 26 muertos con lo que llegamos a 1,431 y 102 contagios, una de las cifras más bajas del último mes, para alcanzar 11,643 contagiados de coronavirus. Muy a tono con todo México, que llegó a 52 mil muertos y 480 mil contagios. En el caso de Yucatán esperemos que sea el inicio de un lento descenso, o bien de una estabilización que se extienda hasta octubre, para luego empezar a bajar…pero también puede simplemente ser que la contabilidad de todos los hospitales no esté completa por ser fin de semana y que las tendencias sigan igual. Veremos que números nos dan los próximos días para ver la realidad. Es interesante llamar la atención a la cercanía de los datos entre Yucatán y Campeche. Entre ambos estados en realidad hay muy pocas diferencias culturales e históricas. Pero su nivel de integración queda aún más claro con la pandemia. En un principio Campeche parecía inmune a la pandemia y las cifras de Yucatán. Pero muy pronto y, quiero llamar la atención en especial a raíz de la apertura y el cambio a semáforo naranja que tuvo Yucatán a principios de junio, las cifras empezaron a correr hasta casi igualarse en proporción al tamaño de la población de cada estado. Uno piensa, sin que se pueda comprobar (todavía), que así como el virus se propagó con toda rapidez por Yucatán alcanzó a Campeche con fuerza a partir de esos días. Veamos: Campeche tiene 900 mil habitantes, y al día de hoy llegó a 600 muertos. Yucatán tiene 2 millones y cuarto y poco más de 1,400. La proporción de muertos por cada 100 mil habitantes, aunque es un poco mayor para Yucatán es muy parecida. Ambos estados están en el “top ten” de muertos a nivel nacional. Como la proporción se hace por millón de habitantes Campeche “gana” y queda hoy en séptimo lugar y Yucatán en el décimo. Pero la mortalidad respecto al total de población es muy parecida. En cuanto a contagios volvemos a parecernos, guardadas las proporciones. Yucatán tiene hoy, como ya vimos, 11,643 y Campeche llegó a 5,064. Una proporción muy parecida respecto al total de población. Aquí es al revés que las muertes; como la proporción a nivel nacional se saca por cada 100 mil habitantes, Yucatán ocupa hoy el quinto lugar nacional de contagios y Campeche el séptimo. Bueno:¿ y a que voy yo con todo esto?, dirán ustedes. A tres puntos: uno, que es una pista que no sólo nos muestra el nivel de integración de las entidades de la península y el papel centralizador de Mérida, es decir la interacción económica, cultural y social, sino también la integración epidemiológica. A todos los efectos prácticos seguimos siendo la misma cosa, una sola región, aunque por razones políticas nos hayamos separado en el siglo XIX. Dos, y aquí la cosa se empieza a poner más interesante, es que nuestra biología es muy parecida, la diabetes, y también el genoma, la raíz maya, el tipo de mestizaje, el aislamiento, los matrimonios, el parentesco etc. Pero también la cultura, las costumbres, el trato, la sociabilidad, la cochinita y mil etcs. O sea que ya sea que el virus se propague por integración económica, por biología o por cultura (o por las 3 causas), queda claro que en la península las características que adopta la pandemia son similares y nos hablan de una dimensión regional de los contagios. Bueno, me dirán de nuevo, y ¿eso que? Por lo que voy al punto 3. Si bien lo anterior es importante para analizar más adelante que nos ocurrió, (esperemos llegar para hacerlo) ahora darnos cuenta de la dimensión regional y no estatal ni meridana de nuestro patron de contagio y de muerte es aún más importante. Es fundamental. ¿Por qué? porque la mejor manera de combatir la pandemia a largo plazo es viendo que el espacio y el escenario de la batalla es uno: la península en su conjunto. Ha sido un grave error renunciar al combate federal y nacional de la pandemia y dejar en manos de las entidades las decisiones. Había que integrar al país y no fragmentar por razones políticas. Y además México se integra por regiones más que por estados. En el caso de la península ninguna de las 3 entidades saldrá sola de contagios y muertes ni las disminuirá si no lo hacen las otras. Lo que una logre la otra lo echará para atrás si no avanza al mismo tiempo. Yucatán ha sido una sola región desde la civilización maya. Lo sigue siendo. O salimos todos o no sale ninguno. Más vale que tomen eso en cuenta las autoridades que quieren prevenir la enfermedad (digo, cuando las encontremos; si las ven me avisan): no habrá soluciones aisladas. Repito: o todos o ninguno. Bueno, salud y suerte.(Luis Ramírez).