Los Phoenix Suns lograron una victoria categórica la noche del lunes al imponerse 125-108 sobre Los Ángeles Lakers, rompiendo así la racha de siete victorias consecutivas del equipo angelino. Pese a la salida temprana de Devin Booker por lesión, el conjunto visitante supo responder con solidez en ambos costados del juego.
Dillon Brooks fue la figura destacada del encuentro con 33 puntos, incluyendo 23 en la primera mitad, mientras que Collin Gillespie aportó 28 unidades, con 16 de ellas en el último cuarto, y estableció una nueva marca personal con ocho triples convertidos.
Booker, máximo anotador del equipo, debió abandonar el partido a solo dos minutos del cierre del primer cuarto tras sufrir una lesión en la ingle derecha. Sin embargo, la escuadra de Phoenix no se vio afectada por su ausencia, mostrando una ofensiva eficaz y una defensa asfixiante que forzó 22 pérdidas de balón por parte de los Lakers.
A pesar de los 38 puntos y 11 rebotes de Luka Doncic, los Lakers no encontraron el ritmo necesario para competir. El equipo local mostró poca energía tras disputar su tercer partido en casa en apenas cuatro noches. Austin Reaves añadió 16 puntos, mientras que LeBron James concluyó con 10, cifra suficiente para mantener viva su histórica racha de 1.297 partidos consecutivos en temporada regular con anotaciones de doble dígito. Esta marca comenzó el 7 de enero de 2007, según se recuerda, “menos de tres semanas después de que naciera Cooper Flagg”, destacaron en la transmisión.
Brooks asumió la responsabilidad ofensiva tras la lesión de Booker, acertando 11 de sus 16 tiros en la primera mitad. En la segunda parte, Gillespie tomó el relevo con una destacada actuación desde el perímetro que terminó por sentenciar el partido.
Con esta victoria, los Suns frenan una racha negativa en la que habían perdido tres de sus últimos cuatro juegos, mientras que los Lakers deberán reagruparse tras ver interrumpido su mejor momento de la temporada.


