La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró este lunes que su administración no tiene “contemplado en este momento” realizar una tercera extradición masiva de narcotraficantes hacia Estados Unidos.
Durante su conferencia matutina, una reportera mencionó un artículo del medio estadounidense The Wall Street Journal (WSJ) en el que se señalaba la posible planeación de un nuevo traslado masivo de internos desde cárceles mexicanas hacia prisiones estadounidenses. Ante ello, Sheinbaum respondió que, hasta ahora, las deportaciones se han limitado a casos en los que los detenidos carecen de orden de aprehensión en el país —y que esos traslados no equivalen a una extradición masiva.
La mandataria, sin embargo, dejó abierta la posibilidad de que en el futuro se lleve a cabo una operación de ese tipo: “ese no quiere decir que no vaya a ocurrir después”, declaró al margen de la pregunta.
Ya en 2025, el gobierno de Sheinbaum concretó dos entregas de presos de alto perfil a Estados Unidos. Entre los trasladados se encuentran figuras reconocidas del crimen organizado como Rafael Caro Quintero, “Miguel Ángel Treviño Morales” (alias “Z‑40”), “Abigael González Valencia” (alias “El Cuini”) y “Servando Gómez Martínez” (alias “La Tuta”).
La política de extradiciones masivas —o de traslados masivos de presos de alto perfil a EE. UU.— ha sido defendida por las autoridades como una medida para despresurizar el sistema penitenciario, cortar redes de corrupción y evitar que los reos continúen operando desde prisión.
Con la declaración de Sheinbaum, el gobierno federal deja claro que, por ahora, no hay una operación de ese tipo en curso. No obstante, la mención de que “no significa que no vaya a ocurrir después” mantiene la incertidumbre sobre el futuro de las extradiciones hacia Estados Unidos.
