El estado de Yucatán puso en marcha un programa piloto para ofrecer autopruebas gratuitas del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) con el objetivo de facilitar el diagnóstico entre quienes lo necesiten.
La iniciativa contempla la distribución de cinco mil autopruebas que podrán recogerse en puntos designados en Mérida, Tizimín y Valladolid, o bien solicitarse con envío a domicilio.
La idea es acercar el diagnóstico a personas que por diversas razones —falta de acceso, horarios complicados o movilidad limitada— no pueden acudir a centros de salud.
Cada paquete incluye la prueba —de tercera generación, capaz de detectar anticuerpos relacionados con VIH— instrucciones claras para su autoaplicación, un instructivo paso a paso, y en algunos casos un enlace QR a material audiovisual explicativo. Los resultados pueden obtenerse en tan solo 15 a 20 minutos.
Además, el programa ofrece acompañamiento a quienes lo soliciten: consejería virtual o presencial, y orientación para acceder a tratamiento antirretroviral en caso de un resultado reactivo.
La campaña, implementada por autoridades locales en colaboración con organizaciones de la sociedad civil —como el Consorcio de Investigación en Salud (CISIDAT)— y plataformas digitales, busca cerrar la brecha en diagnóstico que actualmente existe en México: se estima que entre el 20 % y 30 % de las personas con VIH desconocen que lo tienen, impidiendo así alcanzar las metas de diagnóstico y tratamiento establecidas internacionalmente.
Con esta estrategia, Yucatán da un paso importante hacia una detección más accesible, discreta y oportuna, con la esperanza de que más personas conozcan su estado serológico y, en su caso, accedan a tratamiento.
