Arsenal, por Francisco Garfias.
Basta con echarle un ojo a Google para darnos una idea
de la cantidad de veces que el Presidente ha dicho en la mañanera que “vamos
bien”.
Los datos duros, sin embargo, reflejan lo desconectado
que está López Obrador de la realidad.
No vivimos el milagro de la multiplicación de los
panes (Attolini comparó al Presidente con Jesucristo), sino el de la
“multiplicación de los pobres”.
Van ejemplos que ilustran la poco envidiable situación
de México en estos tiempos difíciles. Son estadísticas basadas en fuentes
sólidas.
Inegi: 1) 5.2 millones de estudiantes no se
inscribieron en el ciclo escolar 2020-2021 por falta de dinero o por razones
vinculadas con el covid-19.
2) Más de un millón de micro, pequeñas y medianas
empresas se esfumaron en los últimos 17 meses.
3) De 12 millones de empleos que desaparecieron en
abril de 2020, sólo se han recuperado 10 millones. Hay un déficit de 2
millones, sin contar los que debieron haberse creado el año pasado.
Secretaría de Economía: En 2020 se cayó 11.7% la
Inversión Extranjera Directa en relación con el año anterior. Se captaron 29.7
mil millones de dólares, monto inferior a los 32.9 mil millones de dólares de
2019.
Consultora Kearney: México quedó nuevamente fuera del
ranking de los 25 países más atractivos como destino para la Inversión
Extranjera Directa. En 2003 fue el tercer lugar.
Coneval: Hay
9.8 millones de nuevos pobres por la pandemia. Sumaban, en total, 74.4 millones
de pobres en 2020 (56.7 por ciento de la
población.) En 2018, representaban el 48.8 por ciento de la población.
OCDE: México registrará, en 2021, la quinta peor
recuperación económica entre los 20 países más industrializados del mundo.
Pemex reportó pérdidas en 2020 por 480 mil 966
millones de pesos.
La lista de las desalentadoras estadísticas es interminable.
No alcanzaría el espacio si incluimos las de salud (tercer lugar en muertes
totales, y primero en fallecimientos de personal sanitario); de seguridad (70
mil muertos en dos años); escasez de medicamentos…
Para un gobierno que tiene como lema “Primero los
pobres” y que se jacta de millonarios ahorros por el combate a la corrupción y
la austeridad republicana, es una vergüenza.
La 4T está muy lejos de equipararse con la
Independencia, la Reforma, la Revolución. Vamos a la 4ª pauperización.
Y no hay esperanza de que se corrija el rumbo. López
Obrador es un hombre de ideas fijas.