Un día un novillero decidió empezar a andar por los caminos. Amanecía y salían las flores nuevas de mayo, como dice la canción. Y se detuvo en una aldea y compró pan recién hecho, qué bien olía, y en unos minutos otro novillero se unió a su caminar.
Caminaron juntos, hablando de Ronda y del azahar, y también de Talavante.
Cuando el sol señalaba el mediodía los campos, en esta ocasión de Andalucía y no de Castilla, eran puro calor y pura vida. Y ya eran cuatro los novilleros que andaban. Y en las plazas y en los parques contaban sobre muletas y sobre naturales…
Y mucha gente escuchaba y aplaudía..
Alguien los invitó a almorzar en una venta. Y es que España es siempre generosa.. aunque haya algunos amarrados. Ni caso. A las cinco de la tarde Lorca hubiera podido componer poemas del cante novilleril. Ya eran once..
Y al anochecer llegaron a una villa. Los que se habían juntado en la caminata: dieciocho. Y se acercaron a la Plaza de Toros. Deleitaron con los capotes e improvisaron un recital de versos y cuentos taurinos… Los novilleros querían torear.
Fue como una estampa juglaresca al compás del ole y de la torería..
Dedicado a los novilleros
Apoyemos las novilladas
Al toreo
Al chico de Cambados, y de Perú, que me ha hablado de toreo y de Roca Rey
A Roca Rey
A Lorca, a la lectura y a la cultura
A Albriux
A Luis
Al mes de mayo
