Por: Cristina Padín.
El curso iba llegando al fin. Tan bonito.. en junio.. con el trabajo bien hecho.. el verano en la esquina.. Era una mañana soleada y dulce.. y la última hora la destinaron a escribir. Leer y escribir: importantísimo. La maestra decía que como mucha gente no leía no entendía las noticias. Y no le faltaba razón.
El ejercicio consistía en comparar algo con un reloj.
Marta comparó el toreo de duende y magia de Talavante con un reloj, dijo que en las dos cosas había latido y había tiempo.
Lourdes comparó la verdad con el reloj. Y tuvo que explicar el relato que escribió. Ella habló de personas tan mentirosas que todo lo falseaban, eran puro postureo, ni un gramo de sinceridad. Y después dijo que incluso un reloj parado en sincero dos veces al día. Fue muy curiosa su historia. Y muy aplaudida..
Después, mientras no tocaba el timbre, hablaron de los mayores, que acababan su Ebau. Y de la honestidad de José Tomás..
Dedicado a la verdad
A la canción El reloj
A mi mago Talavante
A Marta
A Lourdes
A los profesores: héroes
A la lectura y a los que aprecian los libros
A José Tomás
A tomasistas
A mi Luis
Al mes de junio
Y a los que hoy salís de fiesta tras la Ebau, sed felices!
