Debido a la emergencia sanitaria por COVID-19, las y los menores de edad permanecen más tiempo en el hogar, por lo que la Oficina de Representación Yucatán del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) exhorta a los padres de familia y personas al cuidado de los pequeños, a extremar precauciones para prevenir intoxicaciones por medicamentos.
La Dra. Flor Rodríguez Melo, coordinadora de Prevención y Atención a la Salud, explicó que son los propios pequeños quienes ingieren las medicinas en ocasiones por su color llamativo y curiosidad, por lo que es importante que siempre estén fuera de su alcance, incluso, de ser posible en cajones bajo llave.
Uno de los primeros signos que pudieran indicar que el niño consumió algún medicamento son cambios en el aspecto físico o comportamiento: coloración en la piel, ya sea morado, azulado o amarillo; vómitos, convulsiones, e incluso respiración rápida, acompañada de sudoración.
La especialista recomendó que, en caso de confirmar o tener sospecha que la o el menor consumió algún medicamento, es importante observarlo, no aplicar remedios caseros o provocar el vómito, y en cualquier signo de alarma acudir a la unidad médica más cercana para recibir atención inmediata.
Al ingerir los medicamentos, éstos llegan al estómago, posteriormente al intestino y, finalmente, pasan a la sangre, lo que podría condicionar un cuadro de intoxicación que puede poner en peligro la vida de los niños o dañar un órgano vital, explicó la especialista.
Para finalizar, algunas medidas de prevención para evitar que los niños ingieran medicamentos de forma accidental son: guardarlos bajo llave, colocar los pastilleros en un lugar fuera de su alcance, nunca decirles que son dulces y conservarlos en sus envases originales.