La Revista

A propósito del Día del Padre: Mi herencia

Marco Cortez Navarrete
Marco Cortez Navarrete
Sígueme en redes sociales:

Justo al cumplir 9 años de edad, mi padre me adelantó que mi herencia sería aprender a trabajar y lo cumplió. A mis 10 años de edad ya me hacía cargo de su comercio; detrás del mostrador y también comprando la mercancía requerida.

A mis 13 años pidió a unos cargadores que colocaran en mis hombros y espalda, uno a uno, sacos de frijol y de maíz, recuerdo que el más pesado fue de 115 kilos. Ya se me olvidó que grano, pero es lo de menos.

Antes de morir me ofreció hacerme cargo de su negocio —nada ostentoso, pero suficiente para vivir—. Le respondí que quería ser periodista, y como si se tratara de una ilusión, me contestó que él siempre quiso ser piloto aviador.

Qu bueno que no lo fue porque mi papá (duro y seco, y a veces hostil) fue el mejor comerciante del mundo. Yo, en cambio, hace rato que hubiese quebrado el negocio y tal vez acabado vendiendo chicles.

Dije que este año no hablaría de mi padre, que finalmente lo dejaría descansar, pero no puedo porque su herencia me hace recordarlo todos los días. Saludos papá, tal vez algún día nos encontraremos de nuevo.

Marco Cortez Navarrete
Marco Cortez Navarrete
Sígueme en redes sociales:

No quedes sin leer...

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img

Lo último