El Papa Francisco propuso que durante el Adviento se invite a Dios a hacerse presente en sus vidas con esta oración: “Ven, Señor Jesús”.
Se trata de una oración sencilla que:
“Podemos decirla al principio de cada día y repetirla a menudo, antes de las reuniones, del estudio, del trabajo y de las decisiones que debemos tomar, en los momentos importantes y en los difíciles”.
El Santo Padre hizo esa propuesta durante la Misa que celebró este domingo 29 de noviembre, Primer Domingo de Adviento, en la Basílica de San Pedro del Vaticano junto con 11 de los 13 cardenales creados ayer en el Consistorio Público Ordinario.
“Es una pequeña oración, pero nace del corazón. Digámosla, repitámosla en este tiempo de Adviento: ‘Ven, Señor Jesús’”.
En su homilía el Papa Francisco reflexionó sobre dos palabras claves sugeridas por las lecturas del día: Cercanía y Vigilancia.
“La cercanía de Dios y vigilancia nuestra. Mientras el profeta Isaías dice que Dios está cerca de nosotros. Jesús en el Evangelio nos invita a vigilar esperando en Él. El Adviento es el tiempo para hacer memoria de la cercanía de Dios, que ha descendido hasta nosotros”.
¿Qué nos recuerda el Adviento, según el Papa Francisco?
Él quiere acercarse a nosotros. Sin embargo, se ofrece, no se impone. Nos corresponde a nosotros decir sin cesar: ‘¡Ven!’. El Adviento nos recuerda que Jesús vino a nosotros y volverá al final de los tiempos, pero nos preguntamos: ¿De qué sirven estas venidas si no viene hoy a nuestra vida? Invitémoslo”.
“Es también el primer mensaje del Adviento y del Año Litúrgico, reconocer que Dios está cerca, y decirle: ‘¡Acércate más!’. Es importante estar vigilantes, porque un error de la vida es el perderse en mil cosas y no percatarse de Dios”.