Por Francisco Garfias
Carlos Loret de Mola diría que se armó “la de Dios Padre” en la reunión de los alcaldes del PAN y el PRD con el gobernador sustituto de Veracruz, Flavino Ríos y su secretario de finanzas, Antonio Gómez Pelegrín.
“¡Ladrones! ¡Tramposos! ¡No tienen una solución! ¡Ahora nos quedamos en Casa Veracruz”, se desgañitaba Miguel Ángel Yúnes Márquez, alcalde de Boca del Río.
Ya encarrerado preguntaba: “¿Dónde está el dinero que hace 15 días llegó para Boca del Río? ¿Qué le hizo? ¡Es su responsabilidad. Eso es robar…!”
El gobernador sustituto replicaba, sin alzar la voz: “Punto número uno, No encubro a nadie y no me robé un centavo….”. Lo mismo repetía su vapuleado secretario de Finanzas.
El justo reclamo de los alcaldes se perdía ante el triste espectáculo que ofrecían los que estaban en Casa Veracruz, sede del gobierno. Los insultos opacaban los argumentos.
Es la estampa viva de un estado en quiebra, postrado, con un montón de necesidades, y sin dinero. Es el tono que impera en el “diálogo” entre el gobernador Ríos y alcaldes de oposición. Es el resultado de haber dejado a Javier Duarte robar a sus anchas, sin mover un dedo para impedirlo. No dejó ni migajas.
El exgordito se fugó. Le dieron todo el tiempo del mundo. Lo aprovechó.
El explosivo “diálogo” lo vimos en el video que circuló, primero en WhatsApp y luego en redes sociales. Fue grabado por alguno de los alcaldes que no cesaban de decir: “¡Venir sin una solución es faltarnos al respeto!”.
Las palabras chocaban unas con otras. Cero comunicación. Después de los gritos al secretario de Finanzas, Flavino concluyó: “No tiene caso platicar” y se paró de la mesa.
Platicamos con el gobernador Ríos. Andaba por aquí. Fue a Hacienda a pedir recursos, Le preguntamos por la reunión.“Fueron muy groseros. En particular, el alcalde de Boca del Río. Nos vamos a apretar el cinturón para enviar recursos a los ayuntamientos, pero quieren el todo o nada”, nos dijo
Ya logró que le dieran para pagar la última quincena y las dos de noviembre. Para obras no tenemos. No es que no querramos”, subrayó.
En el CEN del PAN están convencidos de que alguien quiere deshacerse de Ricardo Anaya. No saben con certeza quién filtró medias verdades, acompañadas de datos falsos, sobre sus viajes a Atlanta para ver a su esposa y sus hijos.
Conjeturas van y vienen. Adversarios no le faltan dentro y fuera del partido. El modus operandi , sin embargo, inclina la balanza hacia los rivales de fuera.
El jefe panista ya logró frenar la inercia propia del escándalo y las acusaciones de Enrique Ochoa Reza de que mintió en su declaración 3de3 plus. El presidente del Partido Revolucionario Institucional alega que no tiene recursos suficientes para acreditar propiedades.
Anaya hizo una consulta formal al Imco y a Transparencia Mexicana. Juan Pardinas y Eduardo Bohórquez, después de analizar su 3de3 plus, firmaron una carta en la que le dan la razón al panista. María Amparo Casar, presidenta de Mexicanos contra la Corrupción, hizo lo mismo. Hasta Agustín Basave salió a darle su aval.
El reportero tuvo acceso a documentos que comprueban un ingreso mensual mínimo de 353 mil pesos. Suman 48 mil pesos que gana en el PAN y 57 mil 200 que ingresa su esposa.
Agregue el flujo de la empresa Cintla que renta locales comerciales de su propiedad. También gana dinero en una segunda empresa, Juniserra, que construye naves industriales. Resumen: 353 mil pesos mensuales.
Tenemos copia de dos estados de cuenta bancarios distintos que el panista ha ido consumiendo desde que se fue su familia. Una que tenía de 3.5 millones de pesos ya bajó a 740 mil. Otra tiene un saldo de 980 mil.
Anaya ha repetido que mandó a sus hijos a Atlanta, porque quiso darles la oportunidad de aprender otro idioma; de vivir en otro país y alimentarse de una cultura diferente. Se fueron en el verano del 2015. Regresan en ocho meses.
Por falta de espacio hablaré hoy sólo de la eliminación de los recursos para infraestructura al Instituto Tecnológico Nacional, y el incremento de la partida a organismos estatales descentralizados, que ya adeudan al citado Instituto dos mil 800 millones de pesos.
El principal problema del ITN es el desconocimiento de la institución. Tiene una matrícula superior a la UNAM y al Poli. 580 mil alumnos repartidos en 266 planteles en todo el territorio nacional. El 47% de los ingenieros son egresados de allí.
El ITN no tiene capacidad de gestión como la UNAM o el Poli. Se atienen a lo que les asigna la SEP. Aurelio Nuño y Otto Granados, fundamentalmente.
En el Presupuesto para el 2017 les recortaron más de mil millones de pesos. Sólo les asignaron 15 mil 320 millones,
El rubro U069, para infraestructura, lo mandaron en ceros. Es decir, no se podrá atender la demanda el año que entra (40 mil jóvenes se quedarán fuera) ni ampliar la cobertura. No habrá más obra, ni se podrán equipar las que ya están.
Paradoja; el Programa de Subsidios a Organismos Descentralizados Estatales (U006) recibe 800 millones más que el año pasado. Esto, a pesar de que las entidades deben a los tecnológicos dos mil 300 millones de pesos. No sólo no ponen, sino les quitan.