En un ataque aéreo masivo en la localidad de Beit Lahia, en el norte de la Franja de Gaza, al menos 87 personas han perdido la vida y más de 40 resultaron heridas, según informó el Ministerio de Salud de Gaza. Este bombardeo, realizado el 20 de octubre, impactó directamente sobre un complejo residencial y dejó varios edificios completamente destruidos. Las labores de rescate se prolongaron durante horas, y algunos equipos aún intentan localizar sobrevivientes atrapados entre los escombros.
El hospital Kamal Adwan, ubicado en el norte de Gaza, colapsó debido a la afluencia de heridos. De acuerdo con las declaraciones de sus directores, la situación es crítica, ya que enfrentan una grave escasez de suministros médicos y personal para atender a las víctimas en condiciones de extrema precariedad. Entre las víctimas se encuentran varios menores, cuyas imágenes han causado conmoción a nivel internacional.
Israel ha intensificado su ofensiva en el norte de Gaza, con el objetivo de neutralizar lo que denomina posiciones de Hamás en la zona. Las autoridades israelíes han señalado que operan con precisión, aunque no han permitido el acceso independiente de medios de comunicación extranjeros a la región. Por su parte, líderes de la ONU han condenado el ataque y han pedido con urgencia un alto al fuego. “La pesadilla en Gaza se está intensificando; la guerra debe parar ya”, afirmó Tor Wennesland, coordinador especial de la ONU para el proceso de paz en Oriente Medio.
