BMW ha defendido el notable peso de su modelo M5, argumentando que es una decisión estratégica diseñada para maximizar el rendimiento y la seguridad. Según la compañía, el aumento en el peso del vehículo se debe a la incorporación de tecnologías avanzadas y materiales de alta resistencia, que no solo mejoran la robustez del coche, sino que también optimizan su dinámica de conducción y su capacidad de respuesta en diversas condiciones.
El fabricante alemán destaca que el M5, a pesar de su peso, ofrece un rendimiento excepcional gracias a su motor de alta potencia y a un sistema de tracción integral inteligente. Estas características permiten que el vehículo mantenga una excelente estabilidad y maniobrabilidad, incluso a altas velocidades. Además, el peso adicional contribuye a una mayor seguridad, proporcionando una estructura más robusta que protege mejor a los ocupantes en caso de colisión.
BMW enfatiza que el desarrollo del M5 ha sido guiado por un enfoque en la innovación tecnológica. El coche incorpora una serie de sistemas avanzados, como la suspensión adaptativa y los frenos de alto rendimiento, que compensan su peso adicional y aseguran una experiencia de conducción superior. La marca también señala que el uso de materiales compuestos y aleaciones ligeras en áreas clave del chasis y la carrocería ayuda a equilibrar el peso total del vehículo, manteniendo su agilidad y eficiencia.
En resumen, BMW sostiene que el peso del M5 es una decisión calculada que permite integrar mejoras significativas en rendimiento, seguridad y tecnología, haciendo de este modelo uno de los más avanzados y completos en su segmento.
