Takeshi Ebisawa, un destacado líder de la yakuza japonesa de 60 años, se declaró culpable en un tribunal de Manhattan de varios cargos, incluyendo el tráfico de materiales nucleares desde Myanmar, narcotráfico internacional y delitos relacionados con armas.
Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Ebisawa conspiró para trasladar uranio y plutonio apto para armas desde Myanmar, con la intención de que estos materiales fueran utilizados por Irán en la fabricación de armas nucleares. Además, estuvo involucrado en el envío de grandes cantidades de heroína y metanfetamina a Estados Unidos, a cambio de armamento pesado, como misiles tierra-aire, destinados a ser utilizados en Myanmar.
Las autoridades estadounidenses detectaron y frustraron las actividades de Ebisawa gracias a la cooperación con sus homólogos en Indonesia, Japón y Tailandia. El plan fue descubierto mediante una operación encubierta de la Agencia de Control de Drogas (DEA) en 2021, donde Ebisawa intentó vender materiales nucleares a un agente encubierto que se hacía pasar por un general iraní.
Ebisawa fue arrestado en abril de 2022 y, tras su declaración de culpabilidad, enfrenta una sentencia que podría condenarlo a décadas de prisión. La audiencia de sentencia está programada para el 9 de abril de 2025.