En un acto cargado de simbolismo, en la emblemática Puerta de Tierra de la ciudad amurallada de San Francisco de Campeche quedó formalmente instalada la Red Estatal de Promoción de Turismo Comunitario, una nueva estructura de coordinación que une a gobierno, academia, sector empresarial y comunidades organizadas.
Este organismo —definido como “una estructura de coordinación sin precedentes”— tiene como propósito central articular esfuerzos intersectoriales para mejorar la promoción, capacitación, infraestructura y competitividad de destinos comunitarios. Además, busca fortalecer la identidad cultural y la riqueza natural del estado, de manera que las propias comunidades sean protagonistas del desarrollo turístico y obtengan beneficios económicos directos.
Durante el evento, la gobernadora Layda Sansores San Román resaltó que, para su administración, el turismo no debe entenderse únicamente como una actividad económica, sino como un espacio para preservar la identidad, fomentar la participación social y fortalecer el tejido comunitario. Al respecto, afirmó: “Nos da muchísimo gusto que estés en nuestra tierra promoviendo estas redes de promoción de turismo comunitario, que creo que son la base del turismo auténtico en donde está la esencia de nuestro estado, de nuestra tierra”.
Asimismo, la titular federal del ramo, Josefina Rodríguez Zamora, reconoció que el estado cuenta con los tres elementos que definen a los destinos líderes a nivel mundial: recursos naturales, riqueza cultural y su gente. Afirmó que en el próximo año podrían comercializarse las experiencias comunitarias campechanas no sólo en la plataforma nacional sino internacionalmente.
Por su parte, desde el gobierno estatal se subrayó que este proyecto turístico se basa en la riqueza cultural, las tradiciones, la historia y la hospitalidad local, enfatizando que las comunidades son “el corazón de este modelo turístico”, pues ellas preservan las tradiciones y ofrecen experiencias auténticas.
Con la instalación de esta red, Campeche inicia lo que sus autoridades describen como una nueva etapa: una apuesta por un turismo más inclusivo, sostenible y con identidad, donde las comunidades tengan un papel activo en la promoción de su patrimonio, y donde los beneficios del turismo se distribuyan de manera equitativa.


