Una concentración del ala disidente del magisterio en la Ciudad de México derivó en un enfrentamiento con la policía de la capital. El miércoles 13 de noviembre de 2025, decenas de integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) retomaron su movilización en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México con la intención de exigir la abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007 y la reanudación del diálogo con el Gobierno federal a cargo de Claudia Sheinbaum.
Los manifestantes avanzaron desde primera hora hasta la calle Correo Mayor, esquina con Moneda, lugar en el que golpearon vallas metálicas de tres metros que cercaban el perímetro de acceso al Palacio Nacional. Intentaron derribar esos obstáculos que, desde el gobierno capitalino, se instalaron como medida de contención ante protestas programadas. En respuesta, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Gobierno de la Ciudad de México (SSC) emplearon polvo de extintores y gas irritante para contener el avance del grupo magisterial.
El enfrentamiento escaló a empujones cuando los policías replegaron a los maestros tras aproximadamente una hora de tensión. Algunos docentes resultaron con golpes. La CNTE señaló que la acción policial constituyó un acto de represión, al tiempo que reprochó que el gobierno no haya cumplido con su palabra de diálogo y solución.
Los docentes demandan tres puntos centrales: la abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007, la derogación de la reforma educativa y un incremento sustancial al presupuesto educativo. Procedentes de entidades como Oaxaca, Chiapas, la Ciudad de México y Zacatecas, los manifestantes instalarán un plantón en la Cámara de Diputados.
El gobierno capitalino había reforzado la seguridad alrededor del Palacio Nacional ante esta manifestación, incluyendo vallas metálicas y presencia del antiguo cuerpo de granaderos. Esta confrontación se suma a la persistente tensión entre el magisterio disidente y las autoridades, que exigen el restablecimiento de negociaciones efectivas más allá de parches parciales que, según los profesores, benefician a menos del 15 por ciento del sector.


