Debido al sismo de 6.6 que se registró en China el 5 de septiembre, bomberos y militares continúan buscando supervivientes al suroeste del país y la cifra de afectados incrementó a 66 personas sin vida y 250 heridos.
La televisión pública CCTV informó que hay más de 11 mil personas evacuadas de las zonas expuestas a deslaves o al derrumbe de edificios. También indicaron, que resultaron dañadas al menos siete plantas hidroeléctricas.
Actualmente, casi todos los afectados están en tiendas de campaña que instalaron los socorristas y el ejército, ya que para ellos es más seguro estar en esas zonas porque temen que haya más réplicas del sismo.
“Todos los edificios presentan un riesgo de derrumbe. Algunos no se han venido abajo pero todos tienen fisuras”, cuenta Yang Qing, jefa del restaurente Moxi, que pasó la noche en una tienda de campaña.
La televisión CCTV también informó de unas 200 personas bloqueadas en el valle de Hailuogou, una zona muy turística de glaciares y cumbres nevadas situada a más de dos mil 850 metros de altitud.
El sismode magnitud 6.6 se produjo el lunes poco antes de las 13:00 horas, a 10 kilómetros de profundidad en la provincia de Sichuan, según los servicios geológicos estadounidenses.
