En una escalada preocupante del conflicto en Ucrania, se ha confirmado que Corea del Norte está enviando tropas y equipamiento militar a Rusia para apoyar sus operaciones en el campo de batalla. Estas acciones refuerzan la creciente alianza entre Pyongyang y Moscú, lo que ha generado alarma en la comunidad internacional, especialmente en Corea del Sur y Estados Unidos.
Imágenes difundidas recientemente muestran a soldados norcoreanos entrenándose en campos militares rusos, donde están recibiendo equipamiento y uniformes antes de su despliegue en Ucrania. Según fuentes de inteligencia surcoreanas, estas tropas no solo estarían colaborando en labores de ingeniería y logística, sino también participando en combate directo en las regiones ocupadas por las fuerzas rusas.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, denunció la presencia de estas tropas como un claro ejemplo de la implicación de terceros países en el conflicto, lo que podría complicar aún más la guerra. Por su parte, el Kremlin ha negado estas afirmaciones, calificándolas como un “engaño”, mientras que el régimen de Kim Jong-un continúa fortaleciendo su cooperación militar con Rusia.
Esta alianza entre Corea del Norte y Rusia ha sido vista como una respuesta a las sanciones y presiones internacionales, y podría tener consecuencias geopolíticas de largo alcance. Además de los efectivos militares, se ha informado que Corea del Norte ha enviado municiones y otro material bélico para sostener el esfuerzo bélico ruso.
