Por: Eduardo Sadot-Morales Figueroa.
Es el año 2024 los mexicanos están pensando en la elección del presidente, considerando los escenarios políticos y de los partidos el presidente de la República, López Obrador, planteará la presentación y el impulso de su candidato. Los partidos políticos en alianza estarán buscando un formar un frente único en materia electoral después de la experiencia de las elecciones intermedias, dónde la estrategia de MORENA fue pulverizar el voto opositor, impulsando la creación de pequeños partidos satélite, que no alcanzan a ganar elecciones pero si fracturan la unidad de la oposición.
Quedó claro, que MORENA perdiendo la mayoría en la Cámara de Diputados, le representó para el gobierno federal, la ventaja de poder culpar a los representantes de los diversos partidos en el congreso federal específicamente los diputados federales, de los errores cometidos en el segundo trienio del gobierno del presidente.
La pérdida de la mayoría representó, la oportunidad de compartir al gobierno y culpar como siempre a los partidos políticos que integraron la cámara en las elecciones intermedias, de lo limitado que pudieran estar las decisiones del poder ejecutivo.
Es así que los errores cometidos por el presidente de la República durante sus tres primeros años, provocaron que los electores le aplicaran un voto de castigo y perdió las elecciones intermedias. Fue así, que el gobierno lo compartiera con una cámara donde MORENA fue minoría con la oposición pero tuvo y representó la ventaja para el presidente López Obrador que de esa manera justificó errores echándoles la culpa a los diputados y la falta de aciertos en su gestión administrativa.
La estrategia manejada por el presidente obrador durante su campaña en el periodo de más de 18 años en búsqueda de la presidencia de la República consistió fundamentalmente en dividir a los mexicanos en polarizar las opiniones y en ser un personaje polémico, a tal grado que hubo corrientes de ciudadanos que prácticamente lo idolatraban y le aceptaban todos los errores que cometiera, en contraposición, ciudadanos que estaban en contra de todas las políticas que implementó hiso evidente que el tejido social estuviera dividió y polarizado, en las familias, en los centros de trabajo, en la aulas en todos los espacios de convivencia, condición que fue aprovechada con la estrategia utilizada por Goebbels en el tercer Reich contra los judíos.
Finalmente la estrategia de las elecciones intermedias le funcionó, el presidente López Obrador, no sabemos si fue planeado o a consecuencia de sus errores cometidos en la estrategia de lucha contra la violencia y su fracasado programa económico, pero le brindó la oportunidad de compartir los errores en su segundo trienio de gobierno para culpar a la oposición de lo que no salió bien, eso le permitió la oportunidad de presentar un candidato de su parte en posibilidades de triunfo, sin embargo frente a la unión de toda la oposición en un solo frente.
MORENA a pesar de contar con 21 millones de votos cautivos de los beneficiarios de jóvenes ninis, ocho millones de la tercera edad y uno de discapacitados, no le alcanza para imponer a su sucesora.
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@Eduardo Sadot