Claroscuro, por: Francisco López Vargas.
En la revista Nexos, el periodista Héctor De Mauleón,
detalla con lujo de minucias lo que sucedió en los comicios de 2021.
En la anterior edición de septiembre hice referencia a
ello en este espacio y, por desgracia, las evidencias de la intervención del
narco son cada vez más evidentes y hasta con pruebas documentadas: fotografías
y copias de depósitos que acreditan transferencias bancarias a cuentas de las
Islas Caimán que suman 7 millones de dólares a la campaña a la gubernatura de
Américo Villareal en Tamaulipas, a través de su hijo.
De los 22 estados que gobierna hoy Morena, la mayoría
de ellos tiene problemas de seguridad que no han sido resueltos. Sólo Campeche
está en la lista de estados seguros, pero decayendo, mientras que el PAN tiene
la corona de la seguridad en Yucatán, pero los problemas se prolongan en 16
entidades como Guadalajara en poder del Movimiento Ciudadano, la panista Guanajuato
y la morenista Baja California.
Las recomendaciones de seguridad incluyen “no viajar
entre ciudades después del anochecer, no tomar taxis en la calle y evitar
viajar solos, especialmente en áreas remotas”, pero esas recomendaciones
incluyen también a los mexicanos.
Colima, Guerrero, Michoacán, Sinaloa y Tamaulipas son
considerados excluidos de las recomendaciones para viajar.
Las alertas piden reconsiderar viajar a Baja
California, Chihuahua, Coahuila, Durango, Guanajuato, Jalisco, Estado de
México, Morelos Nayarit, Sonora y Zacatecas. El gobierno de Estados Unidos les
ha prohibido a sus empleados viajar por la carretera 45, desde Irapuato a las
ciudades de Silao y León, en Guanajuato, y se han restringido los viajes
también en la carretera federal 45D a Celaya, Salamanca e Irapuato por los
elevados números de secuestros, asesinatos asociados con el crimen organizado.
A eso se le agrega la creciente preocupación del
Comando del Norte de Estados Unidos sobre la presencia cada vez más elevadas de
agentes militares rusos en el país.
Haciendo historia, el gobierno mexicano ha sido
permisivo con el narcotráfico en el país por la gran derrama Económica que ha
significado desde la década de los 60, cuando aparecieron los primeros indicios
de protección y hasta de complicidades con funcionarios y militares mexicanos.
En los 70´s se llegó a la decisión de nombrar a Arturo
Moreno Moreno como director de aduanas, un policía que trabajó para la extinta
Dirección Federal de Seguridad, responsable de combatir a los guerrilleros en
la administración de Luis Echeverría y en el gobierno de José López Portillo
escaló a ser jefe de seguridad durante su campaña y jefe de la policía del
entonces Distrito Federal, en una época donde se dedicó a reclutar ladrones de
bancos, narcotraficantes y secuestradores, pero tenía antecedentes como
traficante de cocaína, cargos que tuvo hasta en Florida y cuyo expediente se
cerró con su ascenso al calor presidencial de Echeverría.
La historia de los abusos del poder en México se
pueden contar por centenas si no que por millares, hasta que el hartazgo social
se manifestó en 1988 cuando Carlos Salinas tuvo que robarse al elección para
llegar al poder, mismo que mantuvo su partido hasta 1997 cuando pierde la
mayoría en el Congreso y después en el 2000 gracias al nacimiento del Instituto
Nacional Electoral, que quita al gobierno la organización de las elecciones.
Una sociedad harta de los abusos, de los excesos y la
corrupción oficial puso la puntilla a un régimen que se negaba a morir y que si
bien cedió la presidencia no lo hizo en los estados, como Campeche, Colima,
Hidalgo, Durango, Coahuila y Estado de México los últimos a los que llegó la
alternancia. Coahuila y Estado de México siguen siendo gobernados por el PRI y
será hasta 2023 cuando se disputen la posibilidad de que un partido diferente
pueda llegar a la gubernatura.
En el breve recuento, Rubén Zuno Arce, hermano de la
esposa de Luis Echeverría, María Esther, fue uno de los más activos protectores
de narcotraficantes y promotor de Félix Gallardo, Caro Quintero y Don Neto
Fonseca, en Jalisco.
Con José López Portillo, el Cártel de Juárez floreció
mientras El Negro Durazo hacía lo propio. En ese sexenio fue encontrado el
rancho El Búfalo, protegido por el ejército, mientras Amado Carrillo Fuentes se
encumbraba.
Miguel de la Madrid vio nacer a los hermanos Arellano
Félix y ya con Salinas apareció el Cártel del Golfo y los Zetas, su brazo
armado, y se sostiene que su hermano Raúl era el que pactó con ellos y estuvo
involucrado en el asesinato de Luis Donaldo Colosio y también fueron
responsabilizados del asesinato del cardenal Posadas Ocampo.
Con Ernesto Zedillo aparece el Chapo Guzmán, creció el
Cártel de Juárez y el de los Amezcua mientras el General Jesús Gutiérrez
Rebollo, zar antidrogas, fue aprehendido por lazos con Amado Carrillo quien
moriría víctima de una operación de cirugía plástica.
Vicente Fox y Calderón dejaron crecer al cártel de
Sinaloa y mientras el Chapo se fugaba en el segundo mes del gobierno foxista,
los Beltrán Leyva y Nacho Coronel se volvían parte del crimen organizado. Fox
volteó la vista y Calderón los combatió a petición de los gobernadores que
vieron la presencia del ejército como un apoyo ante la corrupción de los
policías locales.
Con Peña Nieto nace el Cártel Jalisco Nueva Generación
y nació un nuevo capo Nemesio Oceguera, El Mencho.
El tema podría ocupar libros con detalles, pero lo
cierto es que hasta octubre de 2022 ni uno de esos gobiernos tuvo la violencia
desatada como ahora y nadie se atrevió a decirle al ejército que respetara los
derechos humanos de quienes, dice el presidente, también son ciudadano con
derecho a votar.
