El espejo roto, por: Bernardo Laris
Rodríguez.
Los que saben de elecciones, dicen que
el manual indica que para el primer mes hay que darse a conocer, el segundo es
para plantear propuestas y el tercero para pedir el voto.
Así, apenas pasada la primera semana aún
no tenemos claro cómo le harán para llevarnos hasta el México exitoso y
abundante que haga feliz a todas las personas que lo habitamos.
Efecto
de espejo roto.
Entre los restos del espejo resaltan las
imágenes de los debates. Hasta ahora han sido acartonados, de cierto golpeteo
entre los contendientes pero aún muy lejos de los formatos que observamos en
países donde la interacción con los moderadores lleva a los candidatos a
mostrar ante la ciudadanía su capacidad para debatir, exponer sus ideas y
mostrar sus reacciones ante temas que a la nación interesan.
Por eso, es de aplaudir que el INE se
haya asesorado con especialistas de la región, entre ellos el partido demócrata
de Estados Unidos.
Durante el debate presidencial a
efectuarse de este domingo en ocho, los moderadores podrán interactuar con los
candidatos de manera inédita e incluso harán preguntas ciudadanas definidas por
encuestas.
Pero ¿qué cree, amable radioescucha?
¡Exacto! Aunque los candidatos ya dijeron que si van, sus representantes se
están asustando. Les preocupa que el formato autorizado convierta a los
moderadores en protagonistas o que los candidatos se la pasen respondiendo
preguntas en lugar de revirar entre ellos.
En pocos días sabremos si el nuevo
formato dio resultados. Seguro que terminando
todos se abalanzarán sobre las encuestas para identificar al ganador y
la contienda entrará a una etapa de mayor profundidad y competencia. La tensión
se incrementará y, acompañada con los calores que se pronostican, la cosa va a
estar re buena.
Ahora lo que falta es buscar las
preguntas adecuadas y pedir al Iepac que haga lo propio con los debates aquí,
en Yucatán.
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