EE. UU. dio a conocer su nueva estrategia global de salud bajo el lema “America First”, en la cual identifica una serie de riesgos sanitarios globales — entre ellos, lo que denomina “Trax”.
La estrategia describe “Trax” como una de las amenazas emergentes que requieren especial atención internacional, junto con otras enfermedades infecciosas y desafíos sanitarios globales.
Con este plan, Estados Unidos busca reforzar su cooperación internacional en salud, con especial énfasis en prevención, preparación y respuesta ante riesgos globales.
El documento subraya la importancia de fortalecer los sistemas de salud pública, impulsar la vigilancia epidemiológica y garantizar la disponibilidad de vacunas y tratamientos eficaces, todo ello como parte de un enfoque integral de salud global.
De esta manera, la estrategia aspira a consolidar un marco de colaboración internacional que permita enfrentar amenazas sanitarias con respuestas coordinadas y eficaces, privilegiando el interés nacional desde una perspectiva global.


