La Revista

El “Felipe Ángeles” ego y venganza contra empresarios exitosos

Luis Repper Jaramillo
Luis Repper Jaramillo
Sígueme en redes sociales:

Por: Luis Repper Jaramillo.* 

lrepperjaramillo@yahoo.com

Confirman líneas aéreas nacionales y extranjeras no operar en el AIFA

La Central
Avionera Santa Lucía (pomposamente llamado Aeropuerto Internacional Felipe
Ángeles (AIFA) nació prácticamente moribundo, pese a la necedad de Andrés
Manuel López Obrador de inaugurarlo en marzo de 2022, como una de las tres
obras faraónicas de su soberbia, pues sólo una de las 4 compañías de aviación
nacionales ha aceptado (por lambisconería) operar en este aeródromo militar
vuelos nacionales, regionales y charters.

Una obra
innecesaria, riesgosa, lejana de las actividades empresariales, turísticas,
comerciales, se servicio, carga del centro neurálgico, atractivo, cultural,
cosmopolita, de diversión y de negocios de la capital del país y centro de
encuentro de la vida política, social, familiar: la Ciudad de México.

El desprecio que
tiene López Obrador por los mexicanos, el país y las clases sociales (clasemedieros,
aspiracionistas, inmorales, malagradecidos) nos dijo, queda demostrado cuando
en un arranque de ira, rencor, frustración, enanez, impidió que México tuviera
un aeropuerto de clase mundial, como el proyectado en Texcoco, porque según su
limitada mentalidad, se construía con cimientos de corrupción -que jamás
comprobó- por lo que decidió, unipersonalmente, habilitar una base aérea
militar con pretensiones de internacional.

Pues bien, déjenme
les digo, este sueño faraónico de Andrés Manuel, no de un plan de gobierno, que
agilizara la movilidad nacional e internacional aérea y proyectara a México con
una terminal de calidad mundial, es resultado del ego y venganza que el
inquilino de Palacio Nacional prometió en sus periplos electoreros de 2018.

Es tanto su odio
hacia los empresarios, emprendedores, iniciativa privada, inversionistas, que
maquinó darles un golpe certero quitándoles la magnífica obra aeroportuaria, que
evitaría, dijo, que los millonarios se hicieran más millonarios en terrenos
federales; pese a que los constructores pagarían todos los impuestos federales,
locales, sociales, comerciales, etc. y generarían millones, sí, millones de
empleos directos, indirectos, formales, temporales y la creación de micro,
pequeñas, medianas y grandes negocios de bienes y servicios en torno a la
terminal aérea.

Como Coordinador
General de México (no gobierna) le enfada el éxito y triunfos de la gente, decidió
a través de una “encuesta patito” -que sólo respondieron sus chairos,
pejezombies, amlovers, adoradores, aduladores, morenistas – que decidieran si
el aeropuerto de Texcoco se concluía, o se iniciaba la edificación de la
Central Avionera Santa Lucía. Tramposamente “ganó” la opción de Andrés.

Volviendo al
presente. Como digo al inicio de la entrega el AIFA nació muerto, pero eso sí,
la Transformación de 4ª se ha gastado (no invertido) millones y millones de
pesos en un concepto que semeja una central de abasto y no un aeropuerto de
talla mundial.

De qué manera este
fallido gobierno recuperará tanto dinero echado a la basura si no contará con
operaciones de las compañías de aviación nacionales, como ya lo decidieron Aeroméxico,
Volaris, Aeromar, salvo Viva aerobús, que se tendió de tapete y dijo a López
Obrador, a través de su dueño, Roberto Alcántara “a la hora que usted diga,
señor presidente”
; es decir, esta empresa dejará de operar en el AICM, para
trasladarse a Santa Lucía,

Es decir, Viva
aerobús arriesgará a sus clientes al viacrucis de llegar desde su hogar (CDMX)
hasta Zumpango, sabiendo que hasta ahora (septiembre 2021) no se ha habilitado
un solo metro de vialidades para llegar hasta ese rincón del Edomex (piensa
inaugurarlo en marzo de 2022). No hay acceso directo sino las atribuladas e
infernales: Insurgentes Norte, Calzada de Guadalupe, la Mexiquense, etc.

Aeroméxico,
primera empresa en desistir trasladarse a Zumpango, Estado de México, su director
general, Andrés Conesa, detalló que la compañía necesita operar en un solo
aeropuerto. “No hace sentido operar en 2 tan próximos porque nuestros equipos
(aviones) a veces van a Guadalajara o Nueva York, y cambiar pasajeros, el
equipo y hacer un “brinco” de 15 kilómetros segmentaría operaciones, aumentaría
costos. Es inoperante”

El director general
de Volaris, Enrique Beltranena Mejicano, sostiene que la empresa “no ha
decidido si operará en el AIFA, hasta que haya certeza y existir
condiciones adecuadas en seguridad, infraestructura, capacidad de servicio y costos

“Para Volaris es
muy importante participar en la redefinición del tráfico aéreo en el área
metropolitana; pero no significa (ni la decisión está tomada) que Volaris haya
concretado volar a Santa Lucía”

Por su parte
Aeromar, línea regional con vuelos domésticos en México, a través de su director
Comercial, Juan Rossello, explicó que su interés y foco de operaciones fue, es
y seguirá siendo el AICM. Lo dejó claro (ni un segundo pensó en el AIFA)
“siempre estamos abiertos a nuevas oportunidades, somos aerolínea regional y
evaluamos la mejor forma de conectividad y de conectar a México. Nuestro foco
es el Aeropuerto Benito Juárez, desde ahí operamos y seguiremos operando en
el futuro
. Lo hacemos feliz y exitosamente en la Terminal 2 del AICM y no
contemplamos mudarnos de ahí”

Está claro, las
empresas nacionales se quedan en el Benito Juárez.

¿Pero qué sucede
con sus similares internacionales de América Latina que vuelan hacia la Ciudad
de México? Copa Airlines (panameña) explicó que deben trabajar en un solo
aeropuerto y estar en donde Aeroméxico por tener una alianza estratégica de
conectividad. No saldrá del AICM.

LATAM (Chile),
exigió claridad en el proyecto (Santa Lucía) pues “es difícil entender lo que
quiere hacer (gobierno de la T4a), por lo tanto, es difícil entender lo que
quiere escuchar”

AVIANCA (Colombia)
en el mundo hay pocos ejemplos de sistemas aeroportuarios funcionales, por lo
que la compañía tiene dudas con el planteamiento que el gobierno federal
(T4a) busca realizar con dos aeropuertos operando simultáneamente. “Es un tema
de industria y técnico. Debe existir una sola forma de hacer las cosas y lamentablemente
no es lo que ese gobierno quiere hacer”

AIRCANADÁ confirmó
su negativa a utilizar el AIFA, pese a informar que aumentará vuelos desde la
CDMX a Toronto, Montreal y Vancouver, pero descartó volar a la Central Avionera
Felipe Ángeles, por lo que enfocará su estrategia de sólo aterrizar y
despegar
del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y destinos de
playa.

Para Air Canadá no
está en sus planes usar la terminal militar de Santa Lucía.

Arribar al AICM es
una estrategia de negocios que ha dado excelentes resultados en esos nichos de
mercado: viajes de negocios, para estudiantes, para reuniones familiares,
charters, carga, etc. ha sido tan exitoso que a partir de noviembre de 2021
aumentará de 15 a 28 frecuencias semanales desde la Ciudad de México hacia
Toronto, Montreal (diario) y Vancouver.

Adelantó que en
2022 inaugurará nuevas rutas hacia Calgary, Ottawa y destinos de playa, pero
desde el Aeropuerto Benito Juárez, descartando en definitiva el AIFA.

Veamos, ahora, el
despilfarro, el gasto innecesario del capricho de Andrés Manuel, por su central
avionera, que descapitaliza el erario público, con el que se deben atender verdaderas
prioridades nacionales:
salud, seguridad, educación, desempleo, pobreza y
pobreza extrema e impedir la corrupción dentro de la Transformación de 4ª.

Los números hablan
por si solos. En 2019 la Cámara de Diputados (LXIV Legislatura) regenteada por Morena
y aliados (PT, PVEM, PES) autorizó un presupuesto para el nuevo aeropuerto,
obra completa, (programada para 2 años y medio) de 95 mil 260 millones 428
mil pesos
. Ipso facto, el “nalga pronta”, Secretario de Comunicaciones y
Transportes, Javier Jiménez Espriú, (corrido del gabinete meses después)
presumió que de su presupuesto aportaba 15 mil millones de pesos. Sumados
harían un “marranito” de 110 mil 260 millones de pesos, oneroso, insisto, por
las verdaderas prioridades nacionales del país.

Tan sólo en 2020
la Secretaría de la Defensa Nacional, dueña, regenteadora, patrona,
administradora y controladora de los terrenos, la obra y la operación del
“Felipe Ángeles” rompiendo toda decencia gastó (porque no es inversión) 168%
más de lo autorizado que había dispuesto la autoridad legislativa, 5 mil 372
millones 200 mil pesos (sólo un año), ignorándolos dispuso 12 mil 257
millones 200 mil pesos
, dinero que López Obrador quitó a fideicomisos(como
el FONDEN), Comisiones, presupuesto para la compra de medicamentos oncológicos
para niños y adultos con cáncer, entre otros.

Pero, a la dupla
López Obrador/Crescencio Sandoval (secretario de la Defensa) les “valieron
madres” las necesidades apremiantes de los mexicanos y gastan recursos multi
millonarios discrecionalmente, con el único afán de satisfacer el ego, la
venganza
de Andrés Manuel contra los mexicanos y empresarios exitoso.

*Miembro de los
Grupos Editoriales Digitales
pausa.mx, cadenapolitica.com, revistapeninsular.com,
elinfluyente.mx, endirecto.com, hoyelimparcial.com

Luis Repper Jaramillo
Luis Repper Jaramillo
Sígueme en redes sociales:

No quedes sin leer...

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img

Lo último