Para lograr cualquier cosa que queramos en la vida siempre habrá precios
que debemos pagar para poder lograrlo. Estos precios son los sacrificios que
hacemos y/o las circunstancias incomodas que debemos de vivir da tal manera que
podamos cumplir con aquello que nos hemos comprometido lograr. Estos precios no
tienen nada que ver con lo económico, en realidad tiene más que ver con lo que
sentimos en relación con lo que perdemos con tal de obtener lo que queremos.
Tienes que tener presente que en todo momento estas tomando elecciones.
Nuestro cerebro está configurado de tal manera que para dar cualquier paso es a
través de estar decidiendo qué hacer, qué elegir. Incluso, no hacer nada, estar quieto y no
moverte es una elección que haces para dar esa orden a tu cuerpo.
Cuando decides ponerte una meta, o cumplir con algo ya sea en el trabajo
o en tu vida personal, tendrás que salirte de tu zona de confort. Esto es hacer
un esfuerzo y prescindir de cosas y situaciones las cuales son también opciones
que puedes tomar. La manera de llevar a cabo tu objetivo dependerá de tu
compromiso, dedicación y enfoque que tengas para lograrlo. Sin eso no llegarás
muy lejos.
Si por ejemplo quieres estudiar una maestría o un diplomado lo cual te
ayudará en tu profesión, y te permitirá crecer, deberás de pagar ciertos
precios que dependerá de ti si estás dispuesto a pagarlos o no. Por ejemplo, si
hablamos del costo de la inversión, tal vez pienses que no tienes el dinero
suficiente cuando en realidad el precio que no quieres pagar es ahorrar o
destinar esa cantidad para tu educación en vez de dedicar esa cantidad en otros
gastos. Tal vez, prefieras salir todos los fines de semana con amigos o con la
familia, y no destinar ese dinero a tu educación. Creerás que es necesario
destinar tus recursos en otros rubros como ropa, diversión, servicios de
televisión por paga, etc. En fin, habrá un muchas cosas que prefieras no dejar
antes de pensar que podría ayudarte a ahorrar para pagar ese plan de estudios
que deseas.
Otro precio que tal vez no estés dispuesto a pagar es el tiempo que vas
a tener que destinar al estudio. Si eres una persona muy social, tal vez elijas
perder la oportunidad de crecer por que crees que ya no tendrías tiempo para
socializar o inclusive para descansar. Si tienes familia, el precio a pagar
estaría en el tiempo que perderías para estar con tu pareja y/o tus hijos. Estar comprometido con
graduarte requerirá de ti mucho tiempo de estudio y dedicación, por lo que ese
tiempo que ahora tienes para los amigos, para tu familia y para ti mismo se
tendrá que ocupar en estudio. Hay gente que tan sólo esta idea la frena de
poder crecer como profesional e inclusive como persona. No está dispuesta a
sacrificar y pagar el precio de no tener ese tiempo para lograr ese objetivo en
específico.
Los precios pagar de una decisión será un gran factor importante para
que puedas lograr lo que quieres para ti. Dependerá que tan dispuesto estés a
querer lograr tus objetivos sin importar los precios para que al final logres
llegar a las metas que te has propuesto para ti. Si realmente estás comprometido
con tu crecimiento y tu éxito podrás pagar cualquier precio para lograrlo.
Tú tienes el poder de controlar tu vida… ¡Úsalo!
