Hace tres días en el Itinerario Político anticipamos algo que en estos momentos ya es un hecho: que Alfredo del Mazo tenía altas posibilidades de ser el candidato del PRI al gobierno del Estado de México.
Así, el diputado federal del Mazo Maza solicitó licencia ayer para separarse de su cargo y registrarse hoy como precandidato de su partido a la gubernatura del Estado de México.
Sin embargo, no fue lo único que vaticinamos el pasado 24 de enero, y es que en ese momento dijimos que este día el abanderado tricolor ya estaría definido.
Hoy, la candidatura de Del Mazo quedará oficializada toda vez que este jueves otros aspirantes a la candidatura priista se reunieron y acordaron respaldar al diputado con licencia.
La pregunta que queda por contestar es, ¿por qué del Mazo fue el elegido para mantener a salvo el bastión del PRI y con ello darle un aliento de vida al tricolor en 2018? ¿Por qué no Carlos Iriarte, líder del estatal del PRI; o Ana Lilia Herrera, secretaria de Educación del Edomex?
La respuesta es porque Alfredo del Mazo se vio favorecido por el desvanecimiento de la alianza PAN-PRD que tenía posibilidad de derrotar a su partido.
Además, el elegido fue el diputado con licencia porque era el mejor posicionado en las encuestas, una vez que fue desactivada la coalición opositora.
Vale la pena señalar que Alfredo del Mazo es el segundo abanderado oficial de la contienda. La primera se llama Delfina Gómez, y es la candidata de Morena que intentará no arrebatarle al PRI la entidad; sino convertirse en la segunda fuerza política mexiquense y con ello ganar terreno rumbo a 2018.
Acaso por este motivo la Morena de López Obrador se alió con el tricolor para romper las coaliciones que hubieran dejado al partido en tercera o cuarta posición. Tal y como en 2016 lo hizo en Veracruz, con el PRI de Javier Duarte.
Otro que también opera secretamente para el PRI es el independiente y ex líder tricolor en el Estado de México, Isidro Pastor, quien juega con la careta de apartidista, únicamente para fragmentar la elección que se llevará a cabo el próximo 4 de junio.
De este modo, el camino para el tricolor ha quedado despejado en la contienda mexiquense y con ello se toma la ventaja en los comicios presidenciales de 2018.