Por: Alonso Ronald
Ortiz García
@RonaldOrtizG
/ ronald.ortizg@gmail.com
La
innovación puede definirse como la introducción de una nueva idea, un
dispositivo, un método, un nuevo modelo o tecnología aplicada para solucionar
un problema. La innovación es, sin duda, una parte central del éxito de
cualquier organización, incluyendo una tan grande como el Estado.
Describir
los diferentes tipos de innovación pública y ejemplificarlos a través de la
toma de decisiones de la actual administración podría ser una guía para
implementar, gestionar, financiar y dotar de recursos de inversión a los
programas que deberán profundizarse y
evolucionar en la siguiente administración desde una visión de Estado.
Es
decir, al leer el Sexto Informe de Gobierno de Rolando Zapata Bello es posible entender la importancia dada a la
innovación en la gestión y administración pública, expresada en gran medida a
través de la construcción de políticas públicas que deben permanecer y
consolidarse en la siguiente administración. Por otra parte, identificar los
tipos de innovación es la base del desarrollo de un marco de trabajo que
permitirá sacar adelante ideas nuevas y fijar expectativas de crecimiento
realistas para gestionar mejor el futuro.
Sin
más, los estudiosos de la innovación distinguen tres tipos: 1) innovación
incremental, 2) innovación semi-radical y 3) innovación radical.
Innovación
incremental: Bienestar Escolar
Las
innovaciones incrementales se definen
como esas pequeñas mejoras en los bienes públicos ofertados y en la
articulación de procesos administrativos y acciones ya existentes pero que es
necesario desarrollar para lograr perfeccionar su funcionalidad final.
Estas
variaciones en las que el Estado se esfuerza por potencializar el valor del
repertorio existente de servicios realizando ajustes incrementales tanto en
contenido como inversión. Las innovaciones incrementales tienen pues un
carácter evolutivo. Pensemos, por ejemplo,
en Bienestar Escolar que comenzó siendo un programa específicamente de entrega
de calzado para evolucionar en un conjunto de acciones orientadas a reducir,
con éxito, la deserción escolar.
Rolando
Zapata Bello, enfatizó en su mensaje que con la entrega de más de un millón de
paquetes del Programa Bienestar Escolar, más de 220 mil niños y jóvenes asisten
con equidad y dignidad a la escuela, con útiles, uniformes escolares y zapatos
completos cada año, así como sus chamarras y con Bienestar Digital, más de 76
mil jóvenes de preparatoria recibieron una laptop para integrarse a la Sociedad
de la Información.
Tanto
Bienestar Escolar, Digital y el conjunto articulado de acciones educativas, han
dado por resultado que el Consejo Nacional de la Evaluación de la Política de
Desarrollo Social (Coneval), evaluará que, entre 2012 y 2016, Yucatán se ubique
como el cuarto estado con mayor reducción del rezago educativo, pasando de 23.4
por ciento a 20.6 por ciento.
Innovación
semi-radical: Estrategia Mejorar
Las
innovaciones semi-radicales modifican significativamente una de dos categorías:
el modelo de políticas públicas o la tecnología de gestión pública, pero no a
la vez. Aún así, el cambio en una de estas dimensiones es suficiente para amplificar exponencialmente la capacidad
del Estado para atender de manera eficiente problemáticas sociales intrincadas.
La
Estrategia de inclusión social “Mejorar”, integró programas y acciones que
resultaban aisladas en un nuevo modelo
que fue reconocido como una buena práctica de políticas públicas a nivel
nacional. Tuvo como objetivo disminuir las carencias por calidad y espacios en
la vivienda, para combatir el hacinamiento, enfermedades respiratorias y
gastrointestinales con lo que se generaron espacios dignos en los hogares.
En
esta administración se construyeron 21 mil cuartos adicionales, 20 mil baños,
seis mil techos, dos mil 600 unidades básicas de vivienda, 19 mil pisos firmes,
así como la instalación de 21 mil tinacos y 65 mil estufas ecológicas. Yucatán
pasó de ser la novena entidad con mayor reducción en el porcentaje de la
población en situación de carencia por espacios y calidad de la vivienda, con
una reducción de 12 por ciento.
Como
toda innovación semi-radical, la Estrategia Mejorar puede perfeccionarse al
integrar tecnología para la gestión pública logrando agilizar procesos y
trámites, dar seguimiento y control a las acciones y transparencia y rendición
de cuentas.
Innovaciones
radicales: Economía y Seguridad
Las
innovaciones radicales suelen ser las grandes ideas que con mayor frecuencia
tenemos en mente cuando debatimos sobre innovación. Tienden a comportar un
cambio importante tanto para el modelo de políticas públicas como para la
tecnología de gestión y llevan cambios fundamentales para el sector, al dejar
obsoletas las soluciones existentes y transformar las propuestas de valor.
Incluso pueden involucrar a grupos de interés anteriormente marginales y a
otras organizaciones, y tienen el potencial de cambiar las reglas del juego en
un sector.
La
trascendencia de la administración de Rolando Zapata se deriva de la
sensibilidad para conducir innovaciones radicales, concretamente en las áreas
de Economía y Seguridad.
En
lo económico se gestaron auténticas políticas de Estado destinadas a la
reindustrialización de Yucatán. La inversión en infraestructura y conocimiento
ha permitido el rediseño de rutas logísticas, el establecimiento de grandes
empresas y la captación de capitales extranjeros que proporcionan a Yucatán un
novedoso modelo de desarrollo económico.
En
su mensaje, el gobernador fue muy claro en los alcances de esta
reindustrialización expresada en el crecimiento sostenido de 3.6 por ciento
anualizado, por encima de la media nacional e, incluso, del comportamiento
económico de Latinoamérica y del mundo.
En
materia de seguridad, el desarrollo de la Estrategia Escudo Yucatán,
consistente en la adecuación del marco normativo, la capacitación,
adiestramiento y aprovisionamiento de los efectivos policiales y el uso de
tecnología de video-vigilancia ha sido una estrategia maestra de innovación
radical en la actual administración.
La
prevención del delito, las mejores condiciones de los cuerpos de seguridad,
policías capaces y tecnología e investigación aplicada han hecho que en Yucatán
tengamos la tasa más baja de homicidios dolosos en todo el país, es decir sólo
2.12 homicidios por cada 100 mil habitantes.
Este
indicador, universalmente adoptado para medir la seguridad, nos describe como
la entidad más segura de México con índices similares a Canadá, Bélgica,
Dinamarca o Corea del Sur.
Con
estos datos concluye una gestión que hoy pinta a Yucatán como una entidad de
grandes oportunidades. Rolando Zapata Bello ha logrado un saldo positivo e
histórico. Queremos seguir por esta ruta: el reto de la siguiente
administración será mantener estos logros, modificar otras estrategias y
generar nuevos caminos. Creemos que es posible seguir trasformando a nuestro
Estado garantizando el cambio y la continuidad a través de la innovación
pública.
(Al margen: bien por la iniciativa del
Ayuntamiento de Mérida de poner al servicio de los ciudadanos la plataforma
digital “Decide Mérida”. La participación ciudadana abierta siempre genera
valor público).