El volante que sí era blanco…
Le decían que era hermoso! Que como él ni uno. Que era fresco como las mañanas del abril más temprano. Que, por supuesto, era sevillano. Sevillano de Sevilla, la que tiene un aroma especial y, obviamente, siempre tiene su duende..
Le decían que era alegre. Alegre como cada ser alegre que sabe vivir la vida, copa de vino a la vera del mar, tarde de paseo con olor a jazmín, noche de estrellas al compás de un beso. O de un verso. O de un poema con versos asonantes y tres besos..
Le decían que era blanco roto o blanco perla o blanco arena o blanco hueso. Lo que sí era
era blanco puro como un lance de Morante, como un natural de Talavante, como un tema de Vicente Amigo. Lo que sí era era flamenco, un volante flamenco…
Un volante flamenco que besaba el suelo de Sevilla peregrinando a su destino de son y sol. Un volante de un vestido de Vicky Martín-Berrocal!
Un volante de color blanco puro!
Dedicado a los volantes
Al flamenco
A Vicky
A mi hermana
A mi Luis
A Morante
A Talavante
A esas personas que Siempre sUeñan cosas hErmosas y con Rítmicas y a cada corazón Taurino con duEnde
A Sevilla y a mis sevillanos
A Vicente Amigo