La Revista

Elogio a The Office

David Moreno
David Moreno
Sígueme en redes sociales:

En la pantalla, por: David Moreno

¿Cómo una serie sobre un grupo de personajes hasta cierto punto anodinos, con personalidades poco atractivas y que conviven en uno de los trabajos más aburridos del mundo pudieron protagonizar una de las series más dinámicas, divertidas e inteligentes que la televisión mundial ha visto en las últimas décadas?. La respuesta a esa pregunta solamente la tendrán al ver The Office. Porque no hay duda alguna: The Office es una serie que no debería ser adorable, pero que termina siéndolo, un programa lleno de personajes entrañables que tampoco tendrían porque serlo y que presenta situaciones que parecen extraídas de una asfixiante rutina pero que la serie convierte en auténticos y absurdos oasis temáticos en los que uno no puede evitar mirar de vez en cuando a su propio reflejo.

Porque en realidad la gran mayoría de nosotros ha tenido en algún momento uno de esos trabajos a los que uno está atado simplemente por la necesidad, lo que hace que sucedan dos cosas: o trates de pasarlo lo mejor posible mientras esperas la oportunidad de hacer algo mucho más satisfactorio o simplemente te mimetizas con lugar convirtiéndote en parte del inventario, en alguien que no tiene más remedio que levantarse todos los días para adentrarte en una caverna laboral esperando que den las cinco de la tarde para salir de ella. Sea cual sea la situación, lo cierto que es que The Office retrata fidelidad a ambas situaciones añadiendo a personajes que hacen aún más evidente la parte más absurda del sistema capitalista: la que convierte al sujeto en objeto, en una entidad más de un engranaje económico en el que vale lo mismo que una engrapadora.

¿Trágico?, por supuesto, la gran tragedia capitalista es precisamente esa: la deshumanización. Y The Office se burla abiertamente de ella, sin tapujo alguno. Lo hizo desde la versión original protagonizada por el gran Ricky Gervais para la BBC pero mejoró tal burla con la versión norteamericana cuyo reparto encabezaba un alucinante y odioso Steve Carrell. El éxito de la versión estadounidense hizo que la serie fuera de 14 originales a 188 episodios. En gran medida, el éxito de lo hecho por Carrell y Compañía recayó no solamente en la sátira capitalista sino que pudo dibujar en ella a una serie personajes arquetípicos de una aburrida oficina para llevarlos al extremo a partir de guiones que retrataban situaciones que traspasaban las barreras planteadas por el arquetipo para instalarse en un territorio nuevo, uno en el que se encontraron con millones de personas que el algún momento terminaron identificándose con ellos.

Es complicado pensar en otro programa que haya hecho de lo patético una aventura, un viaje delicioso del que uno no puede apartar la vista. Un programa que puede presentar a un personaje tan odioso como Michael Scott y hacer que el seguidor de la serie lo llegue a querer precisamente por esa característica, o a un perdedor grandilocuente como Dwight Schrute (Rainn Wilson) de quien es tan sencillo burlarse como terminar admirando su ingenuidad, su pretendida inocencia. O una pareja tan insegura y entrañable como la que forman (¿o no?) Jim Halper (Jhon Krasinski) y Pam Beesly (la maravillosa Jenna Fischer) que convierten al romance laboral en un afrodisíaco visual que termina por embriagar al espectador en ese deseo irremediable de que los personajes finalicen su camino por la serie uno junto al otro.

Han pasado 8 años desde que The Office cerró para siempre las puertas de su sucursal televisiva. Pero la serie ha envejecido con mucha dignidad. Ello se debe a que el sistema ésta nos contó se mantiene vigente a pesar de que los síntomas de su decadencia se van haciendo cada vez más fuertes. Por ello ver The Office resulta en algo tan placentero y divertido es mirar como todo aquello que en algún momento se nos vendió como el pináculo del éxito no es más que una trampa más para seguir siendo parte de una maquinaria cuyos engranajes son seres humanos que buscan, aunque no lo sepan, todos los medios para salir de la misma.

  La serie completa está disponible en Prime Video.
 

David Moreno
David Moreno
Sígueme en redes sociales:

No quedes sin leer...

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img

Lo último