Una erupción volcánica en Indonesia ha dejado al menos seis personas muertas y varias más desaparecidas, según informaron las autoridades locales este lunes. El volcán Mount Semeru, uno de los más activos de Indonesia, entró en erupción la tarde del domingo, arrojando una gran columna de ceniza y material piroclástico que cubrió vastas áreas de la región.
La erupción, que ocurrió en la provincia de Java Oriental, ha provocado el desbordamiento de ríos cercanos y una serie de incendios en las zonas circundantes debido a la alta temperatura de las rocas y gases expulsados. Las autoridades locales han desplegado equipos de rescate en busca de sobrevivientes, y han advertido que el riesgo sigue siendo alto debido a la inestabilidad de la zona.
Hasta el momento, se han reportado al menos seis víctimas mortales, aunque el número podría aumentar a medida que avanzan las labores de búsqueda. Los equipos de emergencia han encontrado varios cuerpos en las cercanías del volcán y en áreas cercanas a las aldeas afectadas. Además, se teme por la vida de decenas de personas que podrían estar atrapadas bajo la ceniza o en áreas de difícil acceso.
La erupción ha obligado a miles de personas a abandonar sus hogares. Las autoridades han evacuado a más de 10,000 residentes de las comunidades cercanas al monte Semeru, ya que la actividad volcánica sigue siendo intensa y los expertos han pronosticado la posibilidad de más erupciones secundarias.
Se ha emitido una alerta roja para los vuelos en la región, ya que la ceniza ha cubierto parcialmente los cielos, reduciendo la visibilidad y aumentando el riesgo de accidentes aéreos. También se ha instado a las personas a no acercarse al cráter del volcán, que continúa expulsando gases y material caliente.
Indonesia se encuentra en el “Cinturón de Fuego del Pacífico”, una región con una alta actividad sísmica y volcánica debido a la subducción de placas tectónicas. El monte Semeru es uno de los volcanes más peligrosos del país, con erupciones recurrentes en los últimos años. En diciembre de 2021, Semeru también registró una violenta erupción que dejó al menos 50 muertos y miles de desplazados.
El gobierno de Indonesia ha enviado equipos de ayuda humanitaria y ha prometido ofrecer asistencia a las familias afectadas por esta tragedia, mientras que expertos en volcanología siguen monitoreando de cerca la actividad del monte Semeru.
Las autoridades indonesias han reforzado las medidas de seguridad en la región y han pedido a los residentes que sigan las instrucciones de evacuación y permanezcan en áreas seguras. La situación sigue siendo tensa, ya que el volcán sigue mostrando señales de actividad continua.
El gobierno ha asegurado que, además de las labores de rescate, se están implementando esfuerzos para llevar ayuda inmediata a las zonas afectadas, incluyendo alimentos, medicinas y refugios temporales. También se ha activado un protocolo para llevar a cabo un análisis exhaustivo de los daños y determinar las necesidades inmediatas de las personas afectadas por la erupción.
La tragedia del monte Semeru es un recordatorio de los peligros naturales a los que está expuesta Indonesia, un país que enfrenta un riesgo constante debido a su ubicación geográfica y la intensa actividad volcánica en la región.