Los New York Jets han tomado la decisión de prescindir de Aaron Rodgers, marcando el fin de su relación con el veterano mariscal de campo después de dos temporadas. La noticia, que se venía anticipando desde hace semanas, fue confirmada a través de un comunicado oficial emitido por el equipo, en el que tanto el entrenador en jefe Aaron Glenn como el gerente general Darren Mougey detallaron la decisión de seguir un camino distinto en la posición de quarterback.
“La semana pasada nos reunimos con Aaron y le compartimos nuestra intención de tomar una dirección diferente en la posición de mariscal de campo”, expresaron los directivos en el comunicado. “Era importante tener esta conversación ahora para proporcionar claridad y permitir que cada una de las partes tenga el tiempo adecuado para planificar su futuro. Queremos agradecerle por el liderazgo, pasión y dedicación que trajo a la organización y le deseamos éxito en lo que venga para él”.
La decisión de los Jets responde a un cambio de estrategia dentro del equipo, que busca reconstruir su ofensiva y encontrar una solución a largo plazo en la posición de quarterback. Según Ian Rapoport, insider de NFL Network, Rodgers será liberado después del 1 de junio, una medida que permitirá al equipo manejar mejor el impacto en el tope salarial y evitar una penalización financiera más severa.
La salida de Rodgers pone fin a un ciclo que nunca logró consolidarse como se esperaba. Tras su llegada a los Jets procedente de los Green Bay Packers, el cuatro veces MVP de la NFL era visto como la pieza clave para convertir al equipo en un contendiente en la Conferencia Americana. Sin embargo, las lesiones y la falta de consistencia en la ofensiva impidieron que su paso por Nueva York cumpliera con las expectativas.
El final de su etapa con los Jets también plantea interrogantes sobre el futuro de Rodgers en la liga. A sus 40 años, el mariscal de campo aún podría atraer el interés de equipos que busquen experiencia y liderazgo en la posición. No obstante, también existe la posibilidad de que decida dar un paso al costado y poner fin a su legendaria carrera en la NFL.
La salida de Rodgers es un punto de inflexión para los Jets, quienes ahora deberán enfocarse en encontrar a su próximo líder ofensivo. Con el NFL Draft y la agencia libre en el horizonte, la franquicia tiene múltiples opciones para reforzar la posición de mariscal de campo y construir un equipo competitivo para la próxima temporada.
Este movimiento no solo marca el final de una era breve pero significativa en Nueva York, sino que también abre un nuevo capítulo en la carrera de Aaron Rodgers, quien ahora tendrá que decidir cuál será su siguiente paso dentro o fuera de los emparrillados.
