Tomiko Itooka, una mujer japonesa reconocida como la persona más longeva del mundo, falleció a los 116 años el 29 de diciembre en Ashiya, Japón. Nacida el 23 de mayo de 1908 en Osaka, Itooka fue reconocida por el Libro Guinness de los Récords en septiembre de 2024 como la persona viva más longeva del mundo, tras el fallecimiento de la española María Branyas Morera a los 117 años. Le sobreviven un hijo, una hija y cinco nietos. Tras su fallecimiento, la monja brasileña Inah Canabarro Lucas, también de 116 años, se convierte en la persona más longeva del mundo.