La Federación Internacional de Automovilismo (FIA) impuso multas a Honda y Renault tras encontrar infracciones de procedimiento relacionadas con el límite de gastos en el desarrollo de sus unidades de potencia en la Fórmula 1. Aunque ambos fabricantes respetaron el límite de presupuesto destinado a motores, la FIA detectó errores administrativos en sus reportes financieros.
Honda fue multada con 555,000 euros, mientras que Renault recibió una sanción de 370,000 euros. Ambas empresas aceptaron el acuerdo de infracción propuesto por la FIA, conocido como “Acuerdo de Infracción Aceptada”, en el cual reconocieron sus errores administrativos al presentar información financiera que incluía datos excluidos o incorrectos en el caso de Honda, mientras que Renault retrasó la entrega de sus informes y omitió detalles relevantes. Además de las multas, ambas compañías deberán cubrir los costos administrativos derivados de la investigación.
La FIA señaló que tanto Honda como Renault actuaron de buena fe y cooperaron durante todo el proceso, proporcionando información adicional cuando se les solicitó. La Federación también confirmó que no existió intención por parte de ninguna de las dos empresas de obtener una ventaja competitiva a través de estas irregularidades. En 2023, todos los fabricantes de motores, incluidos Renault y Honda, cumplieron con el límite presupuestario en cuanto a desarrollo y producción de unidades de potencia, lo que contribuye a la competitividad equitativa en el deporte.
Por su parte, Renault ha anunciado que finalizará su programa de motores en la Fórmula 1 al concluir la temporada 2025. Se espera que, a partir de 2026, el equipo Alpine utilice unidades de potencia de Mercedes.
