Mérida, Yucatán; 28 de septiembre de 2017 (ACOM).- En los últimos tres años, la plataforma de renta de espacios de hospedaje ha crecido de manera dinámica y en este momento unas 900 propiedades en Yucatán, trabajan para esta empresa estadounidense llamada Airbnb, lo cual tiene el alerta a los hoteleros yucatecos que exigen regular esta aplicación.
El problema, según indicó Héctor Navarrete Medina, presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles de Yucatán, es que entre un 5 y 6 por ciento de la ocupación hotelera del estado se realiza a través de este sistema.
Vía telefónica, Navarrete Medina expresó que el crecimiento de Airbnb es tal, que en este momento un 35 por ciento de los espacios de hospedaje en Mérida y los municipios de la costa se realiza a través de esta plataforma que debe de ser regulada.
Expuso que México es ya el quinto sitio del mundo con más reservaciones para esta plataforma cibernética y esto obliga a que el gobierno federal tenga que intervenir, para establecer un registro y mecanismos de responsabilidad fiscal para los propietarios de estos espacios de hospedaje.
Hemos entablado un diálogo con la empresa -Airbnb- quien ha escuchado los requerimientos del gobierno federal sobre aspectos de registro de propiedades, algo valioso e importante, pero es solo un primer avance, sostuvo el dirigente hotelero.
Hay varias cuestiones implícitas en este problema, señaló, no hay una figura fiscal para que los propietarios cubran el 16 por ciento de IVA para el pago de sus impuestos, otra cuestión es que a través de una ley federal debe darse una ley estatal y con ello, un reglamento municipal para ajustar a los propietarios.
El mecanismo va, desde reglamentar el pago del 3 por ciento para la bolsa nacional de promoción de los destinos turísticos del país, pero también un registro de cada propiedad sobre aspectos de seguridad, protección y mecanismos de certeza jurídica para el consumidor.
En Yucatán, se estima que unas 900 propiedades rentan para Airbnb, el 65 por ciento de éstas se ubican en el Centro Histórico, el restante 35 por ciento, en las costas donde en casas veraniegas por temporada.
En realidad, los hoteles no sufren pérdidas, sino bajas en su ocupación, aseguró Navarrete Medina. El problema es para los proveedores turísticos, que si resienten estas bajas de ocupación.
En este momento, dijo, hemos pedido que las autoridades de los tres niveles que intervengan, porque en el caso del municipio debe reglamentar el uso, para ubicar estas propiedades que podrán ser revaluadas en el pago catastral por predios comerciales, con ello, el pago de basura y agua potable.
Hay que establecer, agregó, que el número de propiedades en renta significa casi el 25 por ciento de las habitaciones registradas en el estado y que los hoteles mantienen un personal, pagan impuestos y son una competencia desleal para este sector económico.