Hugo Boss, el gigante alemán de la moda, ha anunciado una serie de cambios estratégicos que implican sacrificios a corto plazo con el fin de alcanzar objetivos más ambiciosos en el futuro. En un comunicado reciente, la empresa destacó que el año 2026 será crucial para la reconfiguración de sus marcas y canales, con el propósito de mejorar la eficiencia de manera sostenible. A pesar de que se espera una disminución de ventas y beneficios en 2026, Hugo Boss ha asegurado que esta estrategia servirá para preparar el crecimiento del mañana.
Daniel Grieder, CEO de la compañía, comentó que desde 2021 la marca ha estado trabajando en un reposicionamiento estratégico bajo la iniciativa Claim 5. Esta reestructuración busca sentar una base sólida para el futuro, lo que ha llevado a la empresa a hacer una pausa estratégica en algunos de sus segmentos, como Boss Womenswear y Hugo, con el fin de perfeccionar su oferta. A largo plazo, Hugo Boss busca superar al mercado y alcanzar un margen EBIT del 12%.
La nueva fase, denominada Claim 5 Touchdown, continuará con el enfoque de Claim 5 pero con mayor agudeza. La compañía se centrará en tres áreas clave: la marca, la distribución y las operaciones. Se prevé un enfoque más selectivo en las ventas mayoristas, así como una expansión de franquicias y una mayor personalización en mercados como Estados Unidos y China. La tecnología, en particular la inteligencia artificial, jugará un papel crucial en la optimización de procesos.
Hugo Boss no solo pretende incrementar sus ventas, sino también reforzar la fidelidad de sus clientes y la relevancia de sus marcas. A través de estas medidas, la compañía espera estar mejor posicionada para ofrecer un crecimiento rentable y sostenible en los próximos años.


