La temporada de premios cinematográficos de 2025 concluye con un creciente protagonismo del cine iberoamericano en la carrera hacia la 98.ª edición de los Premios de la Academia, que se realizará en 2026 en Los Ángeles. Varias producciones de habla hispana y portuguesa han sido seleccionadas por sus respectivos comités nacionales para competir por la estatuilla en categorías relevantes, especialmente en la de Mejor Película Internacional, donde las propuestas de la región buscan consolidar su presencia en el cine mundial.
Una de las cintas más representativas es Belén, dirigida por la actriz y cineasta argentina Dolores Fonzi. Según reportes recientes, esta película fue seleccionada como la representante de Argentina para competir en los Oscar y también en los Premios Goya del próximo año. La historia se inspira en hechos reales en torno a una joven tucumana encarcelada por un aborto espontáneo y la abogada que la defiende, con una narrativa que ha generado atención internacional por su componente social y humano.
Por su parte, México también ha apostado por una producción nacional de fuerte carga histórica. La película No nos moverán, dirigida por Pierre Saint‑Martin Castellanos, fue anunciada como la representante del país en la carrera por los Premios Oscar y Goya. Este filme, que se ambienta en torno a las secuelas sociales de la masacre de Tlatelolco de 1968, fue distinguido previamente en festivales y ha sido destacado por su enfoque dramático y estético.
Además, otras producciones iberoamericanas se mantienen bajo observación entre las consideradas para la contienda internacional, lo que refleja el creciente interés de la industria cinematográfica global por el cine más allá de Hollywood. Estas películas representan no solo la diversidad cultural de la región, sino también historias propias con resonancia universal, desde dramas sociales hasta narrativas íntimas que dialogan con audiencias de todo el mundo.
El proceso de selección para la categoría de Mejor Película Internacional en los Premios de la Academia implica que cada país presente una sola obra, tras lo cual la Academia decide la lista final de nominados. En los últimos años, varias producciones iberoamericanas han logrado posicionarse en esta categoría, lo que ratifica el impacto de la cinematografía de la región en el escenario internacional.
Con estas propuestas, países como Argentina y México buscan posicionarse una vez más en la escena de los Oscar, consolidando un ciclo de éxitos y reconocimiento para el cine iberoamericano en el ámbito más prestigioso de la industria cinematográfica mundial.
