Tan solo tiene 15 años, pero ya estudia en la Escuela Superior de Música y ha dado conciertos en el Palacio de Bellas Artes, el Auditorio Nacional y el Auditorio Blas Galindo, sorprendiendo a todos con su talento
Ángel Mario Prado Moreno estudia solfeo, coro y cultura musical, además de la secundaria, pero lo que realmente le ha ganado la admiración de sus profesores es su prometedora habilidad para tocar el violín
A la edad de 6 años, ya era tan bueno con la flauta dulce que su profesora de primaria no dudó en recomendar que empezara una carrera profesional, sabiendo que la música podría ser algo muy importante en su vida
Mientras la mayoría de niños de su edad prefería la música pop de moda, Ángel se enamoró de la clásica cuando estaba en la primaria, debido a que le ofreció un camino directo para expresar sus emociones
Todos los días dedica dos horas a practicar con su instrumento favorito, pero también se prepara para estudiar armonía, italiano y ruso, a fin de reforzar su formación artística
Los fines de semana acude a la Escuela Nacional de Música del Instituto Nacional de Bellas Artes, a la par que ya sabe que quiere hacer una carrera en matemáticas, tal vez en mecatrónica o robótica, cuando sea “grande”
Y mientras perfecciona su habilidad con el violín, sueña con algún día ser compositor y director de orquesta
Para todos los niños como él (y no tan niños), Ángel tiene una recomendación: hacer algo que los apasione y también les permita realizar una aportación social, para que en vez de verla como una responsabilidad se convierta en un gusto por la vida.
Recientemente, Ángel compartió en redes sociales que obtuvo 107 de 128 puntos para ingresar a la educación media superior, calificación que le permitió acceder a la preparatoria número 5
“Alcanzar un sueño no es un camino fácil, pero si lo sigues vas a llegar a ser grande y exitoso y te sentirás muy bien contigo mismo”