Únicamente habría un concierto.. nada más el concierto del verano, y de la temporada, y del año… Irían! Más de nueve kilómetros alejaban su lugar de veraneo de la zona elegida para el evento..
Pero irían.
Era un verano largo y bello. En junio habían ido a Galicia a vivir la leyenda de la noche de San Juan, algo único! Después habían aplaudido a José Tomás en Algeciras. Más tarde pasaron días y noches en Ronda, la blanca y redonda..
Regresaron a tierras gallegas para rezar al Santo y para el recital de Rosalía.. Ahora sus momentos eran para disfrutar las hermosas playas de Cádiz. Acudirían a ver al Juli en Antequera..
Y por supuesto irían a ver al guitarrista. De las más puras guitarras flamencas. Profundo. El mejor! Le habían conocido en sus inicios.. y se trataba de uno de esos seres únicos que no cambian con el triunfo..
Él siempre supo estar al lado de su gente. Y su gente ahora peregrinaría a su concierto…
Dedicado a la gente de ley
A Juli
A José Tomás
A los flamencos que enamoran las guitarras
A mi flamenco
A mi mago Talavante
A Lourdes
A mi Luis, con mil besos