Por: Jacob José Rodríguez Calderón.
Estimado lector, se está asumiendo una nueva forma de gobierno, han llegado las consultas para quedarse. Claramente el nuevo gobierno está cediendo la responsabilidad de gobernar a un formato de consulta que viene definido por una dicotomía entre “Si” ó “No” sin prestar atención a las causas y los efectos que estas respuestas pudieran tener sobre el equilibrio económico y presupuestal de México.
El próximo 24 y 25 de noviembre se va a llevar a cabo esta nueva consulta en la que se preguntarán temas entre los que destacan: El tren Maya, el tren del Istmo de Tehuantepec, la refinería Dos Bocas, el aumento de la pensión a adultos mayores, pensiones a discapacitados entre otros temas. Por lo que se observó en la consulta realizada previamente con respecto al aeropuerto de Texcoco, los resultados que se obtengan de esta nueva consulta van a ser decisivos para las políticas públicas que se lleven a cabo en el próximo sexenio.
Dos puntos a considerar, el primero es que a diferencia de las elecciones pasadas, en estas consultas no se están debatiendo las propuestas, por ejemplo, por mencionar el tema del aumento a la pensión a los adultos mayores, quién más que su servidor no desearía que incrementarán estas pensiones, sin embargo hay que considerar de ¿Dónde se va a sacar el dinero? ¿Afectará el presupuesto de investigación, seguridad o salud?, y bajo que premisas presupuestales se está proponiendo dicho aumento, no hay que olvidar que la deuda que tiene México hoy en día es elevada (cerca de 50 puntos del PIB).
El segundo punto, es el formato de la consulta, si por un decir yo le preguntará a usted que me está leyendo si estaría de acuerdo en que incrementemos su ingreso al doble, ¿Qué respuesta me daría?, es más que obvio que la mayoría de nosotros opinaríamos a favor, ahora bien, si yo le preguntará ¿Estaría de acuerdo en incrementar los impuestos? La respuesta sería natural de igual manera. Pues en este sentido los proyectos no pueden existir sin recaudación o endeudamiento, así que cada una de estas propuestas tienen que venir detalladas de los contrastes que acarrean.
Lamentablemente la consulta del 24 y 25 es una consulta muy a modo en donde el gobierno entrante se resta la responsabilidad de gobernar y delega está responsabilidad al pueblo. Esperemos que el próximo Secretario de Hacienda logre equilibrar la balanza presupuestal, de lo contrario habrán consecuencias graves por esta peculiar forma de gobernar.
