Especial / La Revista
La reactivación económica de Yucatán promovida por el Gobierno del Estado tiene como prioridad la salud de todos los yucatecos. Por esa razón, se está realizando de manera escalonada, responsable oportuna y condicionada, siguiendo las experiencias más positivas de otros países y priorizando las actividades que representen menor riesgo de contagio para la población yucateca.
Como anunció el Gobernador Mauricio Vila Dosal, las directrices de los expertos en salud pública son enriquecidas por diversas voces de la sociedad en un Plan Estatal para la reapertura escalonada de la economía del estado, para lo cual se realizan mesas de trabajo con la participación de representantes de organismos empresariales, patronales, sindicales, universidades y organismos de la sociedad civil.
En Yucatán, la reactivación económica parte de tres principios claros:
1. Proteger la salud de las y los Yucatecos
2. Apertura gradual de las actividades económicas considerando el riesgo de contagio y la importancia en la economía.
3. Un nuevo orden bajo esquemas de monitoreo y protocolos sanitarios que permitan controlar los contagios en esta nueva etapa de reapertura.
Para proteger la salud de las y los yucatecos, el grupo de expertos en la materia y la autoridad estatal de Salud, determinaron 7 indicadores, 4 de ellos que permitirán dar seguimiento a la capacidad del sistema de salud y 3 para seguir el comportamiento de los casos de contagio. En este sentido los indicadores serán el “semáforo” que permitirá pensar en una apertura gradual de la economía.
En lo que respecta a la apertura gradual de las actividades económicas se consideran dos elementos:
1. El riesgo de contagio de cada actividad.
2. El impacto económico de la actividad considerando los empleos que se generan y la participación en la economía estatal.
En cuanto al riesgo de contagio de las actividades se analizan 21 criterios técnicos para 3 medidas de riesgo:
1. La exposición de la población, es decir, los niveles de riesgo de acuerdo a la cantidad de personas que interactúan en una actividad y a la capacidad de controlar el ambiente en que se hacen las actividades
2. La exposición al contagio que existe dada la forma de operar tradicional (riesgo intrínseco de contagio)
3. La habilidad para salvaguardar la salud de la gente, que se refiere a la capacidad de mitigar los riesgos de salud en las interacciones de empleados, en las operaciones y en el ambiente de trabajo.
Una vez que se ha analizado el riesgo de contagio y el impacto en la economía de las actividades se diseñarán “olas” de reapertura priorizando aquellas actividades con menor riesgo de contagio y posteriormente su impacto en la economía del estado.
Resulta importante señalar que, antes de reanudar sus operaciones, los sectores deben contar con protocolos de higiene y prevención para la mitigación de riesgos de contagio, los cuales deberán ser implementados de forma estricta y validados por los especialistas de salud del Gobierno del Estado.
A manera de ejemplo, durante la primera mesa para el desarrollo del Plan Estatal de reapertura económica, el Gobernador Mauricio Vila anunció que, a partir del lunes 18 de mayo, las empresas dedicadas a la fabricación de piezas para el sector aeroespacial, aeronáutico y automotriz en Yucatán comenzarán a operar de nueva cuenta.
Para ello, ya se tienen listos los protocolos de higiene y prevención para reanudar actividad, siempre anteponiendo la salud de sus colaboradores y población en general.
Asimismo, Vila Dosal precisó que, del 18 al 31 de mayo, se realizará la planeación del protocolo sanitario y la capacitación de estrictas medidas de higiene y prevención para que el 1 de junio la industria de la construcción pueda volver a sus operaciones, todos condicionados a estrictas medidas de higiene y prevención de contagios.


