Desde hacía muchos años todo era distinto. El mundo se dividía en Real y Con Filtros. Al alcanzar una determinada edad uno elegía donde deseaba establecerse. Las cosas no eran iguales en una parte y en otra, nunca lo son.
Aquella tarde fue muy diferente en Real y en Con Filtros..
Pablo y María compartieron pizza y ensalada antes de salir para la Plaza de Toros. Camisa azul pastel llevaba él, vestido blanco con un volante lucía ella. La corrida era muy buena. A los dos les fascinaba el toreo…
A sus quince años habitaban en Real..
También dos chicas, M y A, querían ir a ver los toros, les gustaba el ambiente. Y presumir de haber ido. En el Filtro Geográfico ya habían publicado que una había comido en un lugar de moda y que la otra regresaba de Granada (todo mentira)
En el Filtro de Tez las dos optaron por ponerse muy morenas. Y en otro Filtro, el de Apariencia Física, M optó por añadirse cinco centímetros, mientras que A escogió una talla menos de pantalón… Cosas de la vida moderna…
El problema se presentó al llegar a la Plaza. Al ser un evento cultural no bastaba con acceder al Filtro de Cultura. Antes había que superar una prueba. Contestar bien a algunas cuestiones relativas a arte, literatura y música…
A M y a A les salió muy mal la prueba. No supieron dar ninguna respuesta. Al salir un resultado negativo no podían acceder a los Filtros de Cultura. Por tanto no serían capaces de aparentar lo que no eran… Por lo tanto optaron por no ir a la corrida…
La vida bonita es la vida real!
Se me ocurrió la historia con un tweet que leí sobre filtros
Y en una conversación con mi querida Rocío: dedicado a ti. Con 15 años das buenas lecciones a gente mucho mayor
A mi Luis
Al toreo
A Pablo
A María
A la vida real, no a la que se finge en redes sociales
Un cuento muy siniestro: me apetecía