El martes 25 de marzo de 2025, miles de palestinos se congregaron en el norte de la Franja de Gaza para manifestarse contra el grupo militante Hamás y exigir el cese de la guerra con Israel. Las protestas, consideradas las más significativas contra Hamás desde los ataques del 7 de octubre de 2023, se llevaron a cabo en ciudades como Beit Lahia y Jabalia. Los manifestantes corearon consignas como “Hamás fuera” y “Hamás terroristas”, expresando su descontento con el gobierno del grupo y la prolongación del conflicto. Algunos portaban pancartas con mensajes como “Alto a la guerra” y “Queremos vivir en paz”.
Estas manifestaciones son inusuales en Gaza, dado que Hamás suele reprimir duramente cualquier forma de oposición. Sin embargo, el creciente deterioro de las condiciones de vida y el aumento del número de víctimas han llevado a la población a expresar su frustración. Según el Ministerio de Salud de Gaza, el número de muertos en el enclave superó los 50,000 el domingo anterior a las protestas.
En paralelo, en Jerusalén y Tel Aviv, miles de israelíes también salieron a las calles para protestar contra la decisión del primer ministro Benjamin Netanyahu de reanudar la guerra. Familiares de rehenes exigieron la reinstauración del alto el fuego y la reanudación de los intercambios de prisioneros.
La reanudación de las hostilidades se produjo después de que Israel rechazara una propuesta de Hamás para avanzar en el acuerdo de alto el fuego, lo que ha intensificado el conflicto y ha llevado a un aumento significativo de las víctimas en ambos lados.