Sean “Diddy” Combs enfrenta una nueva acusación de agresión sexual, esta vez por parte de un hombre que alega haber sido víctima de una agresión en 2007 durante una de las conocidas “fiestas blancas” del artista en East Hampton, Nueva York. El demandante, identificado como “John Doe”, era empleado de una empresa de seguridad privada en ese momento. Según su testimonio, Combs le ofreció dos bebidas que, según sospecha, estaban adulteradas con GHB y éxtasis. Tras consumirlas, comenzó a sentirse “extremadamente enfermo”. Combs, aparentando preocupación, lo condujo a un vehículo vacío donde presuntamente lo sodomizó. El demandante afirma que, después del incidente, informó a su supervisor, pero no fue convocado nuevamente por la empresa. Además, sostiene que una celebridad presenció la agresión y la encontró divertida. Como consecuencia, su matrimonio terminó y ha sufrido problemas de salud mental desde entonces. La demanda busca daños compensatorios y punitivos. Los representantes legales de Combs han negado las acusaciones, afirmando que “el Sr. Combs nunca ha agredido sexualmente a nadie, adulto o menor, hombre o mujer”.