En la comunidad de Atasta Pueblo, municipio de Ciudad del Carmen, en el estado de Campeche, pobladores y ejidatarios se manifestaron frente a las instalaciones del Petróleos Mexicanos (Pemex) tras una fuerte explosión en un ducto de arribo del complejo de gas.
La explosión ocurrió el pasado jueves cerca de las 17:00 horas en el ducto denominado “Omega”, que transporta gas del centro de procesos Nohoch Alfa, en la zona de la Sonda de Campeche, hacia el centro de procesos y transporte de gas Atasta.
Según la empresa, la fuga de gas fue controlada y no hubo personas lesionadas.
Los manifestantes exigieron que Pemex proporcione información amplia, tanto sobre lo ocurrido como sobre las medidas que implementará para prevenir nuevos accidentes, así como la contención de los impactos medioambientales.
Se señaló que los ductos de Pemex hacia el Centro de Procesos Atasta “están convertidos en una bomba de tiempo” por la falta de mantenimiento en los últimos años, lo que representa un gran peligro para quienes viven cerca de esas instalaciones.
Además, la comunidad afirma que de manera continua sienten un fuerte olor a gas y que, a pesar de ello, Pemex “siempre niega que se presenten fugas y que este sea nocivo o peligroso para los habitantes de las comunidades aledañas”, lo cual, según los pobladores, “solo es una trampa o mentira, ya que las enfermedades de cáncer han aumentado en los últimos años”.
Los inconformes advirtieron que la intención de Pemex de ocultar la realidad podría llevar a que la comunidad “se levante” para exigir indemnización por los daños que han sufrido: “atrás ya quedó el mensaje que el que contamina, paga, ya que solo contaminan y afecten, sin beneficios para los productores afectados”.
Tras el diálogo, los directivos de Pemex acordaron reunirse esta semana con autoridades locales para entregar la información solicitada y establecer un canal de comunicación con la comunidad.
La manifestación y el reclamo comunitario subrayan una creciente tensión entre la empresa petrolera y los residentes de Atasta, que demandan transparencia, mantenimiento adecuado de las instalaciones y protección frente a riesgos que consideran latentes para su entorno y salud.
